Lunes 7 de septiembre de
2009
Lucas
4, 31-44
Romanos
6, 22
Me levanté como
desorientado, sin rumbo. ¿Señor, y qué me has traído a hacer a este mundo?
¿Cuál es mi misión? Yo sé que servirte, ¿pero cómo? Si ahora ya no tengo ni
empresa y no siento que me dices qué hacer. ¿Será que ya no quieres que inicie
otra empresa? Ilumíname, Señor. En la madrugada me levanté bastante
confundido y a las 2:00 a.m., el Señor me dijo:
31
Jesús enseñaba a la gente en las reuniones de los sábados, 22 y su
enseñanza hacía gran impacto sobre la gente, porque hablaba con autoridad. 33
Se hallaba en la sinagoga un hombre endemoniado, y empezó a gritar: 34
«¿Qué quieres de nosotros, Jesús de Nazaret? ¿Has venido a destruirnos? Yo sé
quién eres: Tú eres el Santo de Dios.» 35 Jesús amenazó al demonio,
ordenándole: «Cállate y sal de ese hombre.» El demonio lo arrojó al suelo, pero
luego salió de él sin hacerle daño alguno. 40 Al ponerse el sol,
todos los que tenían enfermos de diversos males se los llevaban a Jesús y él
los sanaba imponiéndoles las manos a cada uno. 43… Jesús les dijo:
«Yo tengo que anunciar también a las otras ciudades la Buena Nueva del Reino de
Dios, porque para eso he sido enviado.»
Luego en la oración de
la mañana me dijo:
6, 22 Ahora,
liberados del dominio del pecado y hechos siervos de Dios, tenéis como fruto la
santidad y como desenlace la vida eterna.
Pasé todo el día sin
tener mayor cosa que hacer. Seguí leyendo el libro de “The Rite” de Matt Baglio,
el cual me sigue cambiando mi forma de ver todo; pues me confirma la existencia
de la “batalla espiritual”, la cual es el centro de nuestras vidas y la mayor
parte de las personas ni nos damos cuenta. Por la tarde nos vino a visitar la Virgen de nuevo, ahora
representada en la imagen de la mamá de la amiga que vino la semana pasada, la
cual es idéntica a la de ella y tiene las mismas lágrimas y escarcha ¿¡Qué
quieres de nosotros Virgen Santísima!? ¿Quiénes somos nosotros?
Martes 8 de septiembre
de 2009
2
Macabeos 15, 21
Me levanté como vuelto a
la realidad, que el juicio no camina. No tengo ningún proyecto que hacer y
nada. Sólo tengo la Esperanza en el Señor... que todo se va a componer.
Hoy es el día de La
Natividad de la Virgen Santísima y leímos con Sylvia Regina La Liturgia de las
Horas. Luego le pedí Palabra al
Señor, para que me oriente y me dé ánimos, pues la verdad es que estamos en un
punto que no sucede nada en el juicio y no entiendo porqué eso ni me preocupa;
pues tengo mi Esperanza puesta en el Señor, pero quería escuchar su
Palabra. Me contestó:
21
Entonces el Macabeo contempló la muchedumbre que tenía delante y que los
combatía con tantas armas diversas, con el apoyo de feroces elefantes; levantó
las manos al cielo e invocó al
Señor que obra prodigios, pues bien sabía que da la victoria a los que la
merecen y que ésta no depende de las armas, sino de la voluntad de Dios.
Miércoles 9 de
septiembre de 2009
Zacarías
1, 13
Me levanté como
confundido y sintiendo un vacío, pues no veo que nada se concreta; más bien
como confundido de cuál es el camino que debemos seguir. El Señor me contestó:
antes de eso… mi corazón gemía: “¡Señor,
Jesús, ten misericordia de mí!”
13 Yavé
dijo entonces: Anúncialo a viva voz: Esto es lo que dice Yavé de los Ejércitos:
Mi amor por Jerusalén y por Sión es tan grande que llega a ser celoso; por eso,
estoy muy enojado con las naciones orgullosas; pues si bien yo estaba
disgustado con Jerusalén, no era para que ellas llegaran a tanto. 16
Por esto, continúa Yavé, estoy volviendo a Jerusalén bien dispuesto; mi Templo
será reconstruido y de nuevo se usará la lienza para medir en Jerusalén,
palabra de Yavé. Todavía te queda algo que anunciar: 17 En mis
ciudades habrá abundancia de todo. Yavé tendrá una vez más piedad de Sión y
volverá a hacer de Jerusalén su predilecta.
Jueves 10 de septiembre
de 2009
Salmo
37, 30
No pude orar, pues nos
fuimos temprano con Guayo a ver una finca en Chalchuapa, arriba en el volcán. Fuimos con Billy. La finca queda a la par de la de Juan o
más bien la que era de Juan. La
finca la vi bonita y en el camino del Señor.
Almorzamos donde mi mamá
y después nos reunimos con Guayo, para hablar de si hacemos una oferta por la
finca o no. Le di gracias a Dios, porque
pudimos hablar muy suave y amigablemente sobre un tópico de negocios. ¡Es la confirmación del Señor, que ya
nos ha liberado!
Fuimos a misa de 6:00
p.m. y luego dimos, en la noche, la charla en “Viveros” sobre “los hijos”. Por alguna razón no sentí que el Espíritu
Santo nos guiaba… pero mi Fe confirmaba que eso era lo que quería que
dijéramos. Me sentí triste, porque
no vi que a nadie de los asistentes le causó mayor cambio.
Viernes 11 de septiembre
de 2009
La
Espada del Espíritu, 136
Salmo
37, 30
Pasé todo el día esperando
alguna noticia de nuestros abogados, pero no vino ninguna. El Señor me dijo:
Gracias Señor, porque nuestras bocas hablan sabiduría y nuestras
lenguas hablan justicia.
El Señor me consoló de
lo mal que me sentía por la charla de ayer, confirmándonos que eso era lo que
El quería que dijéramos.
El día pasó y mi Fe pasó
otra prueba, pues comprendí que ya todo está en manos del Señor y confío en que
todo va a salir bien. Continué
leyendo el libro de “The Rite”, el cual está marcando mi corazón, afianzando mi
Fe y comprendiendo y acercándome más a ese mundo espiritual que no vemos y que
tanto marca nuestros procedimientos, que a veces ni entendemos.
Sábado 12 y Domingo 13 de
septiembre de 2009
Me levanté a preparar el
programa, el Evangelio de hoy trata sobre cuando Jesús le dice a Pedro:
Apártate de mí Satanás.
Lo que me confirma, que lo
que dice el libro de “The Rite” es correcto y cómo a veces satanás nos usa,
para acciones que son contrarias a la voluntad de Dios y tentar a otras
personas. Pasamos solos con Sylvia
Regina toda la tarde y la noche, pues Camila se fue a una boda y Rober se fue a
la casa de Coatepeque de un amigo. Almorzamos juntos y después fuimos a Galerías y pudimos
comprar algunas cosas, algo que ya hace mucho tiempo no hacíamos, pues no
teníamos con qué.
Después alquilamos una
película, se llamaba “Una noche en Manhattan”, al final le dije a Sylvia Regina
cuanto la amaba, pues me di cuenta cómo me ha bendecido Dios que todavía está
conmigo y me haya soportado todos estos años y nos haya dado la familia que
tenemos.
Por la mañana nos
levantamos a desayunar y después a misa, para irnos para El Flor.
"No olvides, niño bobo, que el amor te ha hecho omnipotente"
San JoséMaría Escrivá de Balaguer - Caminos 875