Lunes 12 de mayo de 2008
Isaías
49, 23-26
Job
19, 29
Zacarías
10, 10-12
¿Señor, adónde estás? Lejos
de consuelos, lo que consigo son afrentas. Resé el Vía Crucis y me consoló bastante. Luego el Señor me dijo:
23 Los reyes serán
tus padres adoptivos y sus princesas tus niñeras. Se agacharán delante de ti
hasta tocar el suelo y besarán el polvo de tus pies. Entonces tú sabrás que Yo
soy Yavé; y que nunca defraudo a los que esperan en mí. 24 ¿Se le
puede quitar su parte a un soldado o escapársele su prisionero al vencedor? 25
Sí, afirma Yavé: Le arrebatarán su prisionero al vencedor y dejarán sin su
parte al soldado. Al que contienda contigo, con él yo pelearé, y yo mismo
salvaré a tus hijos. 26 A tus opresores los haré comer su propia
carne y se emborracharán con su sangre como si fuese vino. Y todo mortal sabrá
que yo, Yavé, soy tu Salvador y que tu Redentor es el Campeón de Jacob.
Terminando de hablar me habló Alex, que me fuera adonde el abogado del
Banco y yo sentí la unción del Señor durante toda la reunión. Logramos negociar un arreglo positivo;
sin que nosotros hayamos que haber “empujado” mucho. Podía sentir la Mano del Señor llevándonos por el buen
camino... ¡Aleluya!! Es el inicio
de lo que nos dijo Sylvia Ann y ahora todo se va a precipitar.
Por la tarde hablé con John y me fue muy franco en decirme cómo se
sentía y comprendí que era la voluntad del Señor que le debíamos ayudar y que
era por eso que el Señor había atrasado tanto el caso, para que le ayudáramos y
fuéramos justos. Le confirmé que
lo íbamos a hacer. Por la noche
Sylvia Regina me dijo que le había dicho el Señor en la reunión del grupo de
oración:
29 Teman que la
espada los hiera a ustedes mismos cuando la cólera de Dios castigue las culpas
y sabrán entonces que hay al fin justicia.
Y además:
10, 10 Los haré regresar
de la tierra de Egipto, los traeré juntos desde Asiria; les daré nuevamente la
región de Galaad y la del Líbano, pero éste se les hará chico. 11
Cruzarán el Mar Rojo, quedará seco el cauce del Nilo. Será aplastado el orgullo
de Asur y no habrá más rey en Egipto. 12 Yavé los hará poderosos y
avanzarán confiados en su Nombre.
Martes 13 de mayo de 2008
Marcos
12, 17
Me levanté cansado y pensando, pidiéndole al Señor que nos ilumine para
saber qué hacer con John. El Señor
me contestó:
17 Entonces Jesús
les dijo: «Devuelvan al César las cosas del César y a Dios lo que corresponde a
Dios.»
Pasé todo el día pensando qué debíamos hacer con John. Me reuní con Alex y en la reunión nos
pusimos de acuerdo qué hacer, pero no a la luz del Espíritu Santo, sino a la
luz humana y yo no me sentía tranquilo. Por la noche, el Espíritu Santo me iluminó y me sentí más
tranquilo y en paz. Además, me di
cuenta en la oficina, que ya nos quedamos sin dinero de nuevo. Nejapa Power ha prometido enviar el
documento a finales de esta semana. ¡Señor, sálvanos!!
Miércoles 14 de mayo de 2008
Salmo
91, 10-16
1
Reyes 8, 16; 23-24
Me levanté temprano a orar y el Señor me dijo:
10 La desgracia no
te alcanzará, ni la plaga se acercará a tu tienda: 11 pues a los
ángeles les ha ordenado que te escolten en todos tus caminos. 12 En
sus manos te habrán de sostener para que no tropiece tu pie en alguna piedra; 13
andarás sobre víboras y leones y pisarás cachorros y dragones. 14
«Pues a mí se acogió, lo libraré, lo protegeré, pues mi Nombre conoció. 15
Si me invoca, yo le responderé, y en la angustia estaré junto a él, lo salvaré,
le rendiré honores. 16 Alargaré sus días como lo desea y haré que
pueda ver mi salvación.»
No pude hablar con Jorge, pues estaba con una calentura tremenda. Pedí al Señor por él, pues comprendí
que venía como ataque del maligno. Por tanto, no pude hablar con John, pero esto sirvió para que
nos reuniéramos con Alex y perfeccionáramos lo que le vamos a hacer, a la luz
de: “dar al César lo que es del César y a
Dios lo que es de Dios” o sea, ser justos a la luz de Dios. Esto me produjo una gran alegría, que
venía del Señor.
Por la noche fuimos a la 11ª Cena del Amor de Ágape y el Padre Mucci
recogió lo que yo ya había pensado sobre el lema: DIOS, UNION Y LIBERTAD.
El Espíritu Santo nos confirmaba lo que está por venir. Cuando regresamos, en nuestras
oraciones, el Señor le dijo a Sylvia Regina:
8, 16 Hoy... he
elegido a Jerusalén para que esté ahí mi Nombre, lo mismo que he elegido a
David para que esté al frente de mi pueblo. 23 ... Tú eres fiel a tu
alianza y tienes compasión con tus siervos cuando te sirven con sinceridad. 24
... Hoy vemos que has sido fiel a tus palabras y has cumplido tus promesas. (foto, en la biblia) Preparémonos para la fiesta
a la que los profetas nos invitan. Dios mismo, lo dice Sofonías, bailará con nosotros.
¡ALELUYA!
Jueves 15 de mayo de 2008
Isaías
12, 1-6
Me levanté triste, pues hoy de nuevo, ya no tenemos dinero para la
planilla. Esto me deprime
bastante, pero tengo confianza en el Señor, que lo de los Bancos va a caminar
rápido; es nuestra única opción. El
Señor me dijo:
1 Y dirás aquel
día: «Te doy gracias, Yavé, porque estabas enojado conmigo, pero se te pasó el
enojo y me levantaste. 2 ¡Vean cómo es él, el Dios que me salva! En
él confío y no tengo más miedo, pues Yavé es mi fuerza y mi canción, él ha sido
mi salvación. 3 Y ustedes sacarán agua con alegría de las vertientes
de la salvación. 4 Ustedes dirán ese día: ¡Denle las gracias a Yavé,
vitoreen su Nombre! Publiquen entre los pueblos sus hazañas, celébrenlo, pues
su Nombre es sublime. 6 Grita de alegría y de contento, oh Sión,
porque grande es, en medio de ti, el Santo de Israel!»
Me sentía bien deprimido, pues de nuevo, siento que el Señor no nos
responde. Me desconsuela el no tener dinero para pagar la planilla y me pongo a
pensar si no he actuado de acuerdo a la voluntad del Señor y debí haberlos
despedido hace tiempo. ¿Señor,
adónde estás? Me fui al Santísimo
a las 4:30 p.m., era la hora Santa del jueves y estuve ahí hasta las 7:00 p.m.;
que terminó la misa. Luego nos
fuimos a la asamblea de Encuentros y estuve ahí hasta las 10:30 p.m. Nos tocó además, cuidar la guardería. Todo se lo dediqué al Señor, pidiéndole
su misericordia. Me sentía bien
cansado, me hace falta sentir la presencia del Señor.
Viernes 16 de mayo de 2008
L.
de H. III-181
Romanos
12, 12-13
Proverbios
3, 6
2
Timoteo 3, 14
Me levanté temprano a orar, le pedí al Señor que me diga qué debo hacer.
Me contestó:
Toda la vida del buen cristiano es un santo deseo. Así
Dios, difiriendo la promesa, ensancha el deseo; con el deseo, ensancha el alma
y ensanchándola, la hace capaz de sus dones. 12 Tengan esperanza y
sean alegres, sean pacientes en las pruebas y oren sin cesar. 13
Compartan con los hermanos necesitados y sepan acoger a los que estén de paso. 36
Reconócelo en todos tus caminos y El hará derechas tus veredas. 3, 14 Tú sigue firme en
todo aquello que aprendiste, de lo cual estás convencido, ya sabes quienes te
lo enseñaron.
Fuimos a misa del cumpleaños de José Adriano. Llegamos Alex, Guayo, mi mamá, Sylvia Regina y yo. Por la noche nos reunimos con una pareja
del grupo. En la reunión se
derramó el Espíritu Santo, lo que me confirmó que el Señor iba a actuar en el
corazón de Roberto y Alex, para que se hiciera lo que más convenía, en el mal
entendido que existe entre ellos.
Sábado 17 y domingo 18 de mayo de 2008
Apocalipsis
18, 2
Me levanté temprano, pues tenía reunión con Roberto a las 8:00, aquí en
la casa. La reunión fue conflictiva, no solo negativa. El se fue molesto y no pude comprender
porqué, pero acepté que si esa era la voluntad del Señor, pues debíamos
aceptarla. Me fui calmando y al
rato, él me habló por teléfono y me dijo que aceptaba lo que nosotros proponíamos
y que firmáramos con el Banco. Me
fui donde Alex y él estaba negativo y no quería firmar sin antes tener una
autorización aceptada, alegremente, de Roberto. Comprendí que era satanás actuando, para causar conflicto y
que el caso con los Bancos no se resolviera, lo cual perjudicaba a todos y que
estábamos en una batalla; pero tenía Fe que el Señor nos iba a sacar adelante.
Fuimos donde el abogado de ambos, a ultimar detalles y ahí llegó
Roberto. Alex le explicó con sus
propias palabras y yo, escuchándolo, le pedía al Señor que le diera a Roberto
el don del Amor, para que se decidiera lo que más convenía. Al final él aceptó y quedamos todos como
amigos. Nos fuimos al Banco y todo
se fue resolviendo por obra del Señor. Todas las actitudes de todas las personas eran positivas. Firmamos a las 12:45 p.m. y después
fuimos con Alex a darle gracias al Santísimo a San José de la Montaña. Yo iba preocupado que no fuéramos a
encontrar parqueo cerca y entonces Alex ya no se quisiera bajar, pues a esa
hora hay misa y... ¡Sorpresa! ¡El
Señor nos tenía reservado un estacionamiento bien cerca y conveniente! ¡ALELUYA!!! Sentí una efusión muy poderosa del
Espíritu Santo, que nos decía:
¡He aquí mi hijo amado, quien es mi complacencia!
o sea, nosotros dos; que habíamos llegado a darle gracias por el acuerdo
con el Banco.
Lloré de alegría de sentir el Amor del Señor. Me sentía con un gozo interno especial. Almorzamos con
Ariana y Luigi y Paolo, fuimos a misa y después al compromiso de Fabrizio, la
reunión estuvo llena del Espiritu Santo, que nos saludaba y nos confirmaba que
todo iba a salir bien.
El domingo fuimos a traer a Camila, después a misa y después al cine con
Rober. En el cine hablé con Jorge
para despedirnos, pues mañana se va al deposition de John. Pude sentir la mano del Señor que me
decía que todo va a cambiar y se va a volver positivo en el juicio. Al llegar a la casa me puse a orar,
dando gracias al Señor por todas sus bendiciones y me dijo:
¡Cayó, cayó la gran Babilonia!
"No te inquietes cuando no puedas meditar.
En esta situación, busca suplirla de otro modo, manteniéndote unido a nuestro Señor con una voluntad amorosa."
San Pío de Pietrelcina
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