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Canonización de Monseñor Romero

jueves, 25 de abril de 2013

Cronología de un Milagro - Julio 2007-II

Lunes 9 de julio de 2007

Me levanté temprano para ir donde mis papás, hoy cumplen 63 años de casados y son un ejemplo para todos nosotros.  Me encontré a mi papá súper mejorado, moviendo inclusive el pié derecho, cosa que el médico había dicho que la parte derecha no la iba a poder movilizar.  Me miró muy contento, como queriendo decirme que él se sentía contento de verme.  Desayunamos con Guayo y mi mamá y la reunión fue positiva.  Me puse a orar, pidiéndole al Señor su misericordia.  Después me puse a tocar el piano y me agradó mucho que Guayo vino y me aplaudió. Le di gracias a Dios por ese momento. Pasé todo el día orando por mi papá.
Por la tarde llegaron todos, había venido Ma. Antonieta y todos nos reunimos en alegría, como en las reuniones de antes, todo era positivo y fraternal.  ¡GLORIA A DIOS!  Mi papá se recuperó bastante y hasta comenzaba a hablar.  Comprendí que el Señor nos iba a hacer el milagro para que, una vez más, la familia se uniera más, viendo y presenciando ¡otro milagro!

Martes 10 de julio de 2007

Romanos 10, 9-17

Dimos gracias a Dios con Sylvia Regina, por todas sus bendiciones, pues hoy cumplimos 32 años de casados.  Rezamos “La Llama del Amor”, pidiendo al Señor sus bendiciones para toda la familia y agradeciéndole por todas las bendiciones que hemos tenido hasta hoy, pues ambos nos sentimos bendecidos.  En mis oraciones le pregunté al Señor: “¿Señor, qué quieres que haga?”.  “Para qué me has estado preparando, por qué siento como que soy un volcán listo para explotar de Tu Palabra y de Tu Gozo, el cual me mueve y me impulsa a una misión que todavía no me has dicho cuál es”.  Me contestó:  9 Si confiesas con tu boca que Jesús es Señor, si crees de corazón que Dios lo resucitó de la muerte, te salvarás. 14 Pero, ¿Cómo lo invocarán si no han creído en él? ¿Cómo creerán si no han oído hablar de El? ¿Cómo oirán si nadie les anuncia? 15 ¿Cómo anunciarán si no los envían? Como está escrito: ¡Qué hermosos son los pasos de los mensajeros de buenas noticias! 17 La fe nace de la predicación y lo que se proclama es el mensaje de Cristo.  Quiero que me proclames y seas portador de la Buena Nueva, para eso es que te he estado preparando   ¿Pero, cómo Señor? ¿en qué Ministerio?  
Fuimos a misa con Sylvia Regina y después a visitar a mi papá, que ya estaba bastante recuperado.  Estábamos todos los hermanos y la reunión fue positiva. Llegó Paolo y fue la estrella de la reunión.  ¡GRACIAS, SEÑOR!

Miércoles 11 de julio de 2007

Sofonías 3, 14-19

Nos levantamos temprano, para felicitar a Sylvia Regina: Sofía, Camila y yo.  No pude orar mucho, pues nos fuimos todos a desayunar y llegaron Ariana y Paolo.  Estábamos con las tres hijas juntas y yo les dije, agradeciéndole a Dios por ese momento: “Qué rico es tenerlas a las tres juntas”, aunque nos faltaba Rober.  Sentía deseos de “ver” al Señor y estar con él. A mediodía me puse a orar y me dijo:

Jueves 12 de julio de 2007

Santiago 2, 22-23

22 Estas viendo que la fe se demostró con hechos y por esos hechos la fe llegó a la perfección; 23 y se cumplió lo que dice la escritura: Abrahán creyó en Dios y esto le fue tenido en cuenta por su justificación y se le llamó amigo de Dios.
Pasé el día triste, pues tengo un deseo enorme de “ver” al Señor, tengo “sed” de El y no lo veo.  Nos reunimos con Alex y decidimos negociar con los Bancos.  El Señor nos iluminó y la reunión fue positiva.  
Por la tarde fui a ver a mi papá y ya platicaba, como que si nada hubiera pasado, es: ¡un milagro de Dios!.  Señal que nos lo va a dejar, por unrato más, escuchando mi llamado y mi plegaria para que pueda contarle que ya hemos solucionado todo. Dios lo quiera así.

Viernes 13 de julio de 2007

Isaías 60, 1-19; 61, 1-3

Me levanté triste y perezoso.  Temeroso de no escuchar a Dios en la oración, pues no lo he escuchado tan claro en los últimos días.  Pasé un largo rato leyendo La Biblia en los primeros tres capítulos del Evangelio de Juan y el Señor me instruía, pero no me hablaba; de pronto me dijo… me aclaró para qué me estaba instruyendo y todo lo que me amaba.  Me dijo:  1 Levántate y brilla, que llega tu luz; la Gloria del Señor amanece sobre ti! 2 Mira: las tinieblas cubren la tierra, la oscuridad los pueblos; pero sobre ti amanecerá el Señor, su Gloria aparecerá sobre ti 3 y acudirán los pueblos a tu luz, los reyes al resplandor de tu aurora. 4 Echa una mirada a tu alrededor y observa: todos esos se han reunido, viene a ti; tus hijos llegan de lejos, a tus hijas las traen en brazos. 5 Entonces lo verás, radiante de alegría; tu corazón se asombrará, se ensanchará, cuando vuelquen sobre ti los tesoros del mar y te traigan las riquezas de los pueblos. 6 Te inundará una multitud de camellos, de dromedarios de Madián y Efá. Vienen todos de Sabá trayendo incienso y oro y proclamando las alabanzas del Señor. 10 Extranjeros reconstruirán tus murallas y sus reyes te servirán; si te herí con ira, con amor te compadezco. 11 Tus puertas estarán siempre abiertas ni de día ni de noche se cerrarán, para traerte las riquezas de los pueblos con sus reyes desfilando. 18No se oirá más en tu tierra ¡violencia! Ni dentro de tus fronteras ¡Ruina, destrucción! 19 ya no será el sol tu luz del día, ni te alumbrará la claridad de la luna; será el Señor tu luz perpetua y tu Dios será tu esplendor. 61, 1 El Espíritu del Señor está sobre mí, porque el Señor me ha ungido. Me ha enviado para dar una buena noticia a los que sufren, para vendar los corazones desgarrados, para proclamar la liberación de los cautivos y a los prisioneros la libertad. 2 Para proclamar el año de gracia del Señor, el día del desquite de nuestro Dios, para consolar a los afligidos. 
Fuimos a visitar a mi papá y la recuperación es ¡milagrosa!

Sábado 14 y domingo 15 de julio de 2007

Fuimos a dejar a Sofía al aeropuerto, que se iba a mediodía.  Por la mañana fuimos a desayunar todos juntos: Ariana, Paolo, Sofía, Camila, Sylvia Regina y yo.  Me sentía bien bendecido.  Fuimos a la Panetiere y Sylvia Regina me dijo que llevara mi agenda, para leerle a las hijas lo que el Señor me había dicho ayer.  Les leí desde el miércoles pasado, estoy seguro que el Señor obró en ellas, con la lectura.
Por la tarde me puse a leer el libro de La Virgen.  El Señor me hizo hincarme enfrente de la imagen del Salvador del Mundo que le regalé a Sylvia Regina y encontré en El, la mirada que le había estado pidiendo al Señor desde que había ido al Retiro de “Fe y Conversión”, “El me miró y yo le miré”.  
Por la noche pude comprar los pasajes a Houston y a Costa Rica, para ir a la boda de Carlos Ricardo.  Además, pudimos, más bien el Señor nos lo concedió que pudiéramos invitar a Ariana y Luigi.  Por la tarde fui a visitar a mi amigo de infancia, director del Banco, para presentarle la oferta a los Bancos.  Me recibió bien positivamente y todo lo vio bien.  Me dijo que me iba a ayudar.  Pero vine triste, con un sentimiento negativo, que no me podía explicar, pues debía estar contento; pero vine triste.
Continué triste todo el domingo, me atemorizaba si me había equivocado en algo con mi amigo.  Fui al programa de radio a las 2:00 p.m. y le dediqué al Señor este sacrificio, pues me fui sin almorzar y ya regresamos como a las 3:00 p.m.  
Por la tarde fuimos a dar el servicio a la misa de Encuentros de 6:15 p.m.  ¡Llegaron todos los del grupo! ¡Comulgaron todos!.  Sólo faltaron los Dreyfus y Annel, que se tenía que quedar cuidando a las niñas.  Gracias Señor, por mantener al grupo perseverando, pues todos estaban contentos.

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