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Canonización de Monseñor Romero

jueves, 4 de octubre de 2012

Cronología de un Milagro - Febrero 2006-IV

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Lunes 27 de febrero de 2006

Jeremías 50, 1-2
Nehemías 9, 34-37; 10, 1-30; 11, 1-2

Me levanté a orar, pidiéndole al Señor que me dé una esperanza, que me haga saber que me escucha; que está cerca.  Me dijo:  1 Palabra de Yavé, que dijo contra Babilonia: 2 «Díganlo entre las naciones para que lo sepan todos; no lo callen, digan: Babilonia ha caído. Babilonia ha sido tomada. Su dios Bel ha sido humillado, Marduk ha sido derribado, avergonzadas están sus imágenes, espantados sus ídolos. 17 Israel era una oveja perdida, perseguida por leones. 19 Yo haré volver a Israel a su corral y comerá el pasto en el Carmelo y en el Basán y en los cerros de Efraím y Galaad tendrá para saciarse. 20 En aquellos días, entonces, se buscará la culpa de Israel, pero no existirá; los pecados de Judá, pero no se hallará ninguno, porque al que salvo, yo le perdono. 21 Sube al país de Meratim (Babilonia) y atácalo; a los habitantes de Pecod (habitantes de Babilonia) persíguelos, toma la espada y mátalos, dice Yavé. Ejecuta mis órdenes fielmente.»  El Señor me daba Esperanza en su Palabra.
En la oficina no pasa nada, excepto que nos llegó una notificación para el caso de Frank Fink, lo cual puede ser y con la Palabra de hoy, entiendo que es una “Esperanza” de Dios; pues esto puede hacer que el caso de “Winston & Strawn” regrese a donde la Jueza Yada Mcgee, que es donde John Houghtaling quería el caso, en su inicio.
Por la noche rezamos con Sylvia Regina el final de su “Jericó” y el Señor nos dijo:  34 Nuestros reyes y jefes, nuestros sacerdotes y nuestros padres no guardaron tu Ley, no hicieron caso de tus mandamientos ni de las normas que tú les diste. 37 Los abundantes frutos que da el país son para los reyes que tú nos has impuesto por nuestros pecados; ellos hacen lo que quieren de nuestras personas y de nuestros ganados, con lo que vivimos en gran tribulación.  1 De acuerdo con todo esto, nosotros tomamos un firme compromiso por escrito. El documento fue firmado por nuestros jefes, nuestros levitas y nuestros sacerdotes. 30 Todos estos, junto con los jefes, sus hermanos, se comprometen por juramento a proceder conforme a la Ley de Dios, promulgada por medio de Moisés, siervo de Dios, y a guardar y cumplir todos los preceptos de Yavé, Dios nuestro, y sus normas y leyes.  1 Los jefes del pueblo se establecieron en Jerusalén. El resto del pueblo echó suertes para que, de cada diez hombres, uno se quedara viviendo en Jerusalén, la Ciudad Santa, quedando los otros nueve en las otras ciudades. 2 El pueblo bendijo a todos los hombres que se ofrecieron voluntariamente para habitar en Jerusalén.  En la página en que el Señor decidió hablarnos estaba la primera foto de “scan” de nuestro primogénito nieto o nieta; hijo o hija de Ariana y Luigi.  
El Espíritu Santo me iluminó para recordarme lo que Edith (la profeta que ya ha visto a Jesús) ya me había dicho y que era que nosotros descendemos de estos hombres que se quedaron a vivir en Jerusalén.  Nosotros estamos, 2,400 años después, sufriendo las mismas consecuencias y de nuevo, por gracia de Dios, firmando espiritualmente un nuevo juramento con  nuestro Señor, que compromete también a nuestras futuras generaciones. ¡Gloria a Dios! ¡Aleluya!
Después nos fuimos a dormir y el Señor me habló a través del Canal 8, que estaban dando una conferencia con Salvador Gómez, sobre Elías: 1 Reyes 19, 1-16, cuando Dios le dice:  9 … «¿Qué haces aquí Elías?» 15 Yavé le dijo: «Vuelve por donde viniste atravesando el desierto y anda hasta Damasco. Tienes que establecer a Jazael como rey de Aram, 16 a Jehú como rey de Israel, y a Eliseo para ser profeta después de ti.

Martes 28 de febrero de 2006

2 corintios 12, 7-9
Hechos 14, 22
2 corintios 11, 24
13, 2-4

El Señor me dijo:  7 Y precisamente para que no me pusiera orgulloso después de tan extraordinarias revelaciones, me fue clavado en la carne un aguijón, verdadero delegado de Satanás, cuyas bofetadas me guardan de todo orgullo. 8 Tres veces rogué al Señor que lo alejara de mí, 9 pero me dijo: «Te basta mi gracia, mi mayor fuerza se manifiesta en la debilidad.»  22 «Es necesario que pasemos por muchas pruebas, para entrar en el Reino de Dios.»  24 Cinco veces fui condenado por los judíos a los treinta y nueve azotes, 25 tres veces fui apaleado, una vez fui apedreado, tres veces naufragué y una vez pasé un día y una noche perdido en alta mar.  13, 2 … Que lo sepan tanto los que vivieron en pecado como los demás. 3 Así podrán comprobar que Cristo habla por mí. El no se muestra débil con ustedes, sino que más bien actúa con poder. 4 Si bien su debilidad lo llevó a la cruz, ahora vive por la fuerza de Dios…  Caí postrado ante el Señor, ¡heme aquí, envíame a mí!
Creí que hoy iba a pasar algo relevante en la oficina, pero no fue así.  Esto me confundió y me pone triste, pues siento como que el Señor está muy cerca de mí, pero no me resulta evidente; pues mi dolor continúa.
Por la noche fuimos a la primera reunión preparatoria del Encuentro No. 48, donde vamos sirviendo para recibir un grupo como animadores.

Miércoles 1 de marzo de 2006

Jesús en teresa, 89
Salmo 49, 2; 3; 16
Lucas 10, 41-42

Me levanté a orar apesadumbrado y pidiéndole al Señor que me explique: ¿por qué es que todavía no nos resuelve el juicio y qué debemos esperar?, pues estoy confundido.  Me contestó:  89 Espántame, después, como en llegando este fuego, que parece viene de arriba, de verdadero amor de Dios… parece que consume al hombre viejo de faltas y tibiezas y miserias y a manera de como hace el ave Fénix –según he leído– y de la misma ceniza, después que se quema, sale otra; así queda hecha otra el alma después de diferentes deseos y fortaleza grande. No parece es la que antes, sino que comienza con nueva puridad el camino del Señor, suplicando yo a su Majestad fuese así y que de nuevo comenzara a servirle, me dijo: “Buena comparación haz hecho, mira no se te olvida para procurar mejorarle siempre.”  Y luego me dijo:  2 Oigan esto, pueblos todos, habitantes del mundo entero, escuchen: 3 gente del pueblo y gente de apellido, ricos y pobres, todos en conjunto. 13 El hombre en los honores no comprende, es igual que el ganado que se mata. 16 Pero a mí, Dios me rescatará y me sacará de las garras de la muerte.  41 … El Señor le respondió: «Marta, Marta, tú andas preocupada y te pierdes en mil cosas: 42 Una sola es necesaria. María ha elegido la mejor parte, que no le será quitada. 
No pasó nada en el día, más bien hablé con Vidal y todavía no había negociado con Mark los gastos, o sea que, de nuevo, pasó otra semana y no parece que va a pasar nada, a corto plazo.  Por el otro lado, también con el abogado local, por alguna razón, tampoco camina el presentar el escrito de la demanda de Alex para otro Banco.

Jueves 2 de marzo de 2006

Números 27, 12-23
Jesús en Teresa 87

Me levanté a orar con poca Fe, pidiéndole al Señor que nos dé una muestra evidente que todos estos retrasos vienen de El, porque nos conviene y que podemos sentirlo cerca de nosotros, con algo que podamos palpar.  Me contestó:  12 Yavé dijo a Moisés: «Suban a esa montaña de los montes de Abarim y contempla desde allí la tierra que yo daré a los hijos de Israel. 13 Cuando la hayas visto, irás a reunirte tú también a tu pueblo, como tu hermano Aarón. 14 Recuerda que ustedes se rebelaron contra mis órdenes en el desierto de Zin, cuando la comunidad murmuró por el asunto del agua y a ustedes les mandé que manifestaran mi santidad delante de ellos.» 18 Yavé respondió a Moisés: «Llama a Josué, hijo de Nun, hombre en que está el Espíritu, y pon tu mano sobre él. 22 Moisés hizo como le había mandado Yavé; tomó a Josué y lo puso delante del sacerdote Eleazar y delante de todo el pueblo. 23 Le impuso su mano y lo estableció como Yavé había dicho por intermedio de Moisés.  En este momento se fueron las luces.  El enemigo queriendo desconcentrarme en este nacimiento del “hombre nuevo”.  El Espíritu Santo me hizo tomar el libro de “Jesús en Teresa” y me dijo:  87 Estas palabras me dice su Majestad muchas veces, mostrándome su gran amor, “ya eres mía y yo soy tuyo”. Las que yo siempre tengo costumbre de decir y a mi parecer las digo con verdad, son: ¿Qué se me da, Señor, a mí de mí, sino de vos? ¡Señor, aumenta mi fe!
Me reuní con Alex y Guayo y la reunión ¡fue positiva!!! Bendito sea el Señor.
Por la tarde fuimos a la misa y al entierro de Eduardo Vides Casanova.  Pude palpar una familia Molina liberada.  ¡Dios está, de nuevo, con nosotros! ¡Hemos sido liberados!  El sermón del Padre me hizo sentir la presencia del Espíritu Santo.  Contó el testimonio de una persona que había experimentado y le había contado que al morir, había sentido que estaba caminando hacia adentro de un túnel celeste y completamente iluminado y que de repente sintió que ya no avanzaba, sino que comenzó a retroceder y volvió a la vida, percatándose que lo que le estaban aplicando eran unos shocks eléctricos al corazón y volvió a la vida.  Le contó al sacerdote que lo que había sentido al momento de estar caminando en el túnel era una gran paz y que al momento de expirar o morir, lo que sintió fue como un suspiro y luego se vio en el túnel.  El Padre contó que esto lo estaba permitiendo Dios para que comenzáramos a entender qué ocurre después de la muerte.  Que eran testimonios que nos debieran servir a todos, para “no tener miedo.”  
Por la noche tuvimos nuestra segunda reunión de preparación para animadores, en casa de los Rengifo.  El Espíritu Santo estuvo bien cerca de nosotros y después en la Asamblea de Encuentros, di mi testimonio dentro de un grupo pequeño de trabajo, que lo que había sentido después de mi primer encuentro con Dios era: “que he vuelto a nacer y vivo en paz y en gozo, aunque todos los problemas continúan igual.”
Regresamos a casa y había un e-mail de Vidal que ya se habían puesto de acuerdo con Mark Lanier y que ahora “el nuevo equipo de abogados” se iba a hacer cargo de todo. Esto era la señal del Señor.  Lo que le había pedido al iniciar el día, ¡Gracias, Señor!

Viernes 3 de marzo de 2006

Salmo 78

El día de ayer fue un día largo, espiritualmente hablando, donde el Señor me ha hecho “un hombre nuevo”… de El.  Me sentí en gozo y paz.  Hoy me dijo:  1 Atiende, pueblo mío, a mi enseñanza, toma en serio estas palabras de mi boca. 4 … A la futura generación le contaremos la fama del Señor y su poder, las maravillas que El ha realizado. 5 … ordenó a nuestros padres que se las enseñaran a sus hijos, 6 para que las conozcan sus sucesores, los hijos que nacerán después. Que éstos se encarguen de instruir a sus hijos. 7 para que éstos confíen sólo en Dios y observen sus mandatos. 8 Para que no  sean, a ejemplo de sus padres, una generación rebelde y obstinada, incapaz de mantener su decisión y cuyo espíritu no era fiel a Dios. 12 ¡Qué milagros no hizo ante sus padres, en la tierra de Egipto, en los campos de Tanis! 13 Hendió el mar y los hizo pasar deteniendo las aguas como un dique. 16 Hizo brotar arroyos de la piedra y las aguas corrieron como ríos. 27 Hizo llover sobre ellos la carne como polvo, aves innumerables como arena del mar. 32 A pesar de esto, pecaron nuevamente, no creían aún en sus maravillas. 38 El, empero, siempre bueno y compasivo, perdonaba su culpa en vez de destruirlos, ¡cuántas veces no refrenó su cólera en vez de desatar toda su ira! 39 Son seres de carne, se decía, soplo que se va y no volverá. 58 Lo irritaron con sus sitios de culto y con sus ídolos lo pusieron celoso. 65 Pero se despertó el Señor como de un sueño, como un valiente que ha dormido la mona, 66 hirió a sus enemigos por la espalda, los dejó humillados para siempre. 70 Eligió a David, su servidor, lo sacó del redil de los corderos, 71 lo llamó cuando cuidaba a las ovejas para pastorear a Jacob, su pueblo. 72 Fue su pastor con un corazón perfecto y con mano prudente los condujo.  
En el día no pasó nada.  Por la tarde no pudimos ir a misa, pues fuimos al médico con Sylvia Regina.  Todo salió mejor de lo que esperábamos – ¡Gloria a Dios!

Sábado 4 y domingo 5 de marzo de 2006

Nos levantamos temprano para ir al lanzamiento de los “Cercos de Jericó”.  Yo podía ir, pues no iba a haber programa, ya que Arturo tenía que servir en el Retiro de Evangelización Fundamental.  Llegamos temprano y fuimos al Santísimo.  El Señor nos hizo un regalo, pues la misa y el lanzamiento fue con el Padre Martín Avalos.  La misa era para uno de los hijos de Tito  – Me dio gusto saludarlo.  Después, toda la mañana no supe qué hacer y pasé leyendo el libro de la “Resurrección del Señor”.  Por la noche fuimos al casamiento del hijo de Cando y la misa estuvo muy linda.  Al final, Monseñor Colindres hizo que los novios se acercaran a los pies de la Virgen y los consagró ante ella.  
El domingo nos levantamos y pasamos un día muy agradable con los de La Fuente, que se habían venido a quedar a nuestra casa.  Roberto Adriano pasó con nosotros todo el día, hicimos barbacoa, vinieron a almorzar Ariana y Luigi; yo le daba gracias a Dios por todas sus bendiciones, por toda la familia, por poder tener esta casa, por podernos dar el lujo de tener invitados, etc.
Fuimos a misa de los “Encuentristas” y el Señor me hizo el regalo fabuloso que nos escogieran para leer los Salmos y después como solo había un Ministro de la Comunión, el Padre Trejos me vino a llamar para que yo impartiera la Comunión.  Me sentí transportado al cielo y súper agradecido e inmerecido por tanto honor.  Iba todo nervioso, pero al momento de lavarme las manos, me encomendé al Espíritu Santo y le dije: “Yo no puedo, no sé cómo se hace, pero Tú si me puedes guiar, así es que toma posesión de mí y guíame.” Todo salió perfectamente.  Sylvia Regina y Rober estaban felices, sobre todo porque el 18 de febrero pasado, Rober me había dicho, en misa, que él iba a pedirle al Señor para que me llamaran a impartir la Comunión.  Fue un regalo hermoso para todos.  Bendición del Señor que nos confirma que nos escucha y está con nosotros – ¡Gloria a Dios!  Rober estaba muy emocionado, porque sabía que el Señor había atendido su súplica – ¡Gloria a Dios!
Más tarde fuimos a nuestro turno de los Cercos de Jericó y estuvimos solos con Sylvia Regina, con el Santísimo, la mayor parte del tiempo.  Al salir del Santísimo, a Sylvia Regina le llamó la atención una imagen de la Virgen de la Paz y cuando la vi me dijo la Virgen: “Llévame a tu oficina”; así es que la aparté para venirla a comprar y llevarla mañana.  Me sentía súper bendecido.

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