Lunes 25 de febrero de 2008
Exodo
19, 4-6
L.
de H. II, 190
Durante la noche no pude dormir bien, pues
como cosa rara, sentía unos piquetes en los ojos, como venitas que se me reventaban. Ya había sentido esto, pero a lo sumo
una vez en el día y de forma esporádica, ahora sentía varios y de gran dolor. Además, no me quería levantar para afrontar
otra semana de “espera”. ¡Esperar en el Señor! pues de El depende todo y ya no
tenemos dinero, más que para esta semana. No tenemos otra alternativa, más que confiar en el Señor, que
El va a poner gracia en el corazón de los Banqueros y en los dirigentes de
Nejapa Power, para que se haga justicia y nos den el dinero que nos correponde rápido y con esto ya
podemos esperar calmadamente, cualquier resolución de los juicios. El Señor me dijo:
4 Ustedes
han visto cómo… los he llevado sobre las alas del águila para traerlos hacía
mí. 5 Ahora, pues, si ustedes me escuchan atentamente y respetan mi
alianza, los tendré por mi propio pueblo entre todos los pueblos. Pues el mundo
es todo mío, 6 pero los tendré a ustedes como un reino de sacerdotes
y una nación que me es consagrada. No se gloríe al sabio de su sabiduría, no se
gloríe el fuerte de su fortaleza, no se gloríe el rico de su riqueza… quien se
gloría, que se gloríe de esto: de conocerme y comprender que soy el Señor.
No pasó nada y el tiempo corre. Mi única esperanza es el Señor. Fuimos a las cinco a rezar el Rosario a
Guadalupe con el grupo de Sylvia Regina, para rezar por que “La Virgen” elija
al próximo Presidente del país.
Cuando terminamos de rezarlo, la que lo
estaba rezando vino a contarnos que la Virgen estaba súper contenta de que
habíamos llegado a cantarle y que ella cuando estaba contenta hacía
demostraciones y la demostración que había hecho era que a ella le había
producido escarcha en sus manos… ¡Gracias Madre!, pues yo había ido algo sin
ganas, pero me di cuenta que Ella si lo apreció.
Martes 26 de febrero de 2008
Salmo
111, 10
Salmo
112
Me levanté suplicándole al Señor su
misericordia, que ahora recibiéramos alguna manifestación positiva. Me dijo:
10 El
principio del saber es temer al Señor, es sabio de verdad el que así vive, su
alabanza perdura para siempre. 112, 1 ¡Aleluya! ¡Feliz el hombre que
teme al Señor y valora mucho sus mandamientos! 2 Su semilla será
pujante en el país, los retoños del hombre bueno serán benditos. 3
Habrá en su casa bienes y riquezas y su honradez, que durará para siempre. 4
Brilla como luz en las tinieblas para los de recto corazón; él comprende, es
clemente y justo. 10 El malvado lo ve y se irrita, le rechinan los
dientes, se debilita; nada queda del deseo de los malos.
No sólo lo de los Bancos no camina, sino que
hoy los llamé y me salieron con que no era el porcentaje que ya habíamos
acordado, con lo que nos vamos a quedar, sino la mitad de eso, que ya no es
mucho, pero cuando menos nos sirve para seguir subsistiendo y comenzar a
trabajar; ni modo, lo que el Señor diga. Les dije que estaba bien, con el propósito de acelerar las
cosas y no seguir estancados.
No hice nada por la tarde, más que ir a misa.
Por la tarde vino José Luis para
arreglar el tanque de agua de la Discovery, pues no tengo dinero para comprar
uno nuevo y ojalá que con este remiendo, quede bien y aguante un poco más. Al subir, Sylvia Regina estaba hablando
con Sylvia Ann y le dijo que ese mismo instante la Virgen le había dicho:
Tell Kuky that I love them and roses are coming his way.
Sentí el amor de la Virgen y del Señor y me
hizo sentir muy contento, a pesar de lo negativo del día.
Miércoles 27 de febrero de 2008
Siracides 29, 11-12
Me levanté decepcionado que ya otra semana se
fue de nuevo y nada pasa. El
enemigo me hizo ver que en realidad sólo pasa lo malo y nada se nos resuelve y
que debía “protestarle al Señor”… pero comprendí que si esa es su voluntad de
Dios, será para mejor y más bien le contesté como Pedro: “Señor, a quién iremos si sólo Tú tienes Palabras de vida eterna”. “Todo lo que me sucede es porque Dios así lo
quiere, y si Dios así lo quiere, por muy mal que me parezca, siempre será lo mejor”.
Luego me contestó, en mis
oraciones:
11 Invierte
tu tesoro siguiendo los mandatos del Altísimo, esto te será más útil que el
oro. 12 Repleta tus graneros con tus generosidades, éstas te
preservarán de la desgracia; combatirán por ti frente al enemigo, 11
Pero tú, hombre de Dios, huye de todo eso. Procura ser religioso y justo. Vive
con fe y amor, constancia y bondad.
Fui a la oficina y no me llegó ningún email,
sólo me toca esperar. A las 3:00
p.m. me fui al Santísimo y estuve ahí una hora. El Señor me dijo:
Jueves 28 de febrero de 2008
Hebreos
10, 35-36
Exodo
34, 10
Jeremías
50, 18-20
Me levanté destrozado. Ya no aguanto más, no aguanto el no
sentir que Dios está cerca y sentirlo lejos; que a lo mejor no existe.
Pasé gran parte de la noche despierto,
pensando lo mismo y rehusando el levantarme por la mañana, para afrontar de
nuevo “la espera”, que ya me mata.
Me levanté a orar, poniéndole al Señor todas
mis debilidades, pidiéndole al Señor que me dé fortaleza para continuar y que
incremente mi Fe. A la Virgen
Santísima que interceda por mí, pues “ya no tenemos vino”. ¡Madre Nuestra, sálvanos! Me contestó:
35 Por eso
no pierdan ahora su resolución, que tendrá una recompensa grande. 36
Es necesario que sean constantes en hacer la voluntad de Dios, para que
consigan la promesa. 34, 10 Yo voy a hacer un pacto en presencia de
tu pueblo; haré maravillas como no se han hecho en ningún país ni nación, para
que el pueblo con el que vives vea las obras terribles que voy hacer por medio
de ti.
Le volví a preguntar al Señor, ¿hasta cuándo
Señor, hasta cuándo? Y me
contestó:
50, 18 Por eso, así
habla Yavé de los Ejércitos, el Dios de Israel: Estoy listo para castigar al
rey de Babilonia y a su país, como ya castigué al rey de Asur. 19 Yo
haré volver a Israel a su corral y comerá el pasto en el Carmelo y en el Basán
y en los cerros de Efraím y Galaad tendrá que saciarse. 20 En
aquellos días, entonces, se buscará la culpa de Israel, pero no existirá; los
pecados de Judá, pero no se hallará ninguno, porque al que salvo, yo le
perdono.
Me fui bastante preocupado a la oficina,
gracias a Dios, pude cubrir el sobregiro en la cuenta del Banco, con fondos de
Sylvia Regina. Me dolió verla a
ella preocupada… ¡Señor, sálvanos! Por la mañana me envió a la oficina un email de Sylvia Ann,
la Virgen nos mandaba a decir:
“Tell them, Kuky and Sylvia, that I
love them. Your situation is in progress. Everything is
going to be all right, because your hearts are pleasing to our Lord!
Por la noche me vine a orar, pues el dolor
que sentía es enorme. El Señor, me
dijo:
Juan 12, 27 Ahora mi alma está turbada, ¿Diré acaso: Padre,
líbrame de esta hora? ¡Si precisamente he llegado a esta hora para enfrentarme
con todo esto! 28 Padre, ¡da gloria a tu Nombre! Entonces se oyó una
voz que venía del cielo: «Lo he glorificado y lo volveré a glorificar.»
Viernes 29 de febrero de 2008
2
corintios 4, 17
Exodo
7, 20
Me levanté sintiendo el cuerpo pesado y
suplicándole al Señor su misericordia. En adición, era día de ayuno, que cada viernes me cuesta más
hacer. Antes no me costaba mucho,
pero hoy paso toda la semana pendiente que ya va a llegar el día y durante el
día sufro bastante, pero todo se lo dedico al Señor.
Me postré y oré en voz alta, pidiéndole al
Señor que me dé fortaleza y que incremente mi Fe. Se lo pedí en voz alta y en el nombre poderoso de nuestro
Señor Jesucristo, su Hijo. A la
Virgen le pedí que interceda por nosotros, pues el dolor que siento es ya
insoportable, es un dolor físico y a la vez espiritual. ¿Por qué Señor, no me respondes? Me acordé de las Palabras de Jesús en la
Cruz.
¿Dios mío, Dios mío ¿por qué me has
abandonado?
Luego me dijo:
17 Esta leve
tribulación momentánea nos produce, en una medida que sobrepasa toda medida, un
eterno peso de gloria.
Pasé el día especialmente triste y
derrotado. Por primera vez en
mucho tiempo, me sentí derrotado y abandonado por Dios. Había pasado toda la semana suplicándole
a Dios que nos resolviera el problema con los Bancos esta semana, pues ya no
aguanto pasar otro fin de semana, sintiéndome abandonado por El. A cambio, lo que recibí es que hablé al
Banco y el ejecutivo con quien hablo y el gerente general andan de viaje y el
gerente no regresa sino hasta el “jueves o viernes” o sea que lo más probable
es que no se pueda firmar la carta sino hasta que esté él aquí y después a lo
mejor alguien de los otros Bancos ande de viaje y ¡nos vamos otra semana! ¡¿Señor, adónde estás, que no te siento¿!
Me fui al Santísimo a las 3:00 p.m. y pasé
ahí una hora. Después fuimos a
misa y no quería ir, pues me sentía resentido, falto de Fe, ¿persiguiendo a un
Dios que no existe?
Le conté a Sylvia Regina cómo me sentía, pues
además me habló Jorge y me dijo que necesitaba dinero para meter el lunes una
petición al juez, la cual nos iba a dar una gran ventaja en el Indemnity Issue; pero le tuve que decir que no los teníamos.
Mi comentario, enojado, a Sylvia Regina fue
que: “encima de todo esto, el Señor nos tiene peleando con ese monstruo de
Nejapa Power con “los dientes” y yo ya no aguanto”.
Al rato apareció ella, que iba a ir a un
shower y no a misa y me dijo: “Vamos a misa, yo ya no quiero ir al shower”,
pues sabía que yo necesitaba ir a misa.
Comprendí la voz del Espíritu Santo, ¡del Dios Vivo! ¡Está Vivo! Y me habla en nuestra casa a
través de Sylvia Regina… pero yo seguía molesto con Dios, falto de Fe y me fui
a misa a regañadientes y sobre todo que estaba en ayunas y sabía que después
había el Vía Crucis en la iglesia Corazón de María y no me quería quedar al Vía
Crucis, pues tenía mucha hambre. En
el sermón, al Padre Pedro lo volvió a “usar” el Señor para hablarme y me dijo
que:
“Deberíamos hacer el esfuerzo de
quedarnos al Vía Crucis, aunque nos sintamos cansados y no queramos. Debemos
hacerlo sólo porque al Padre le gusta que nosotros suframos la misma Pasión que
su Hijo y recordemos esos momentos en que su Hijo padeció por nosotros y así le
expresemos su amor”
… ¡Comprendí el mensaje! Al final, sólo le pregunté a Sylvia
Regina, ¿nos vamos a quedar? Yo ya sabía cuál iba a ser su contestación, pues
iba a ser la misma del Espíritu Santo y me dijo: “nos quedamos”.
Durante el Vía Crucis, el Espíritu Santo me
iluminó para comprender que el ir al cielo es un regalo tan grande que nadie se
merece ir a Él, sin haber sufrido en esta vida… o sea, “la expiación de sus
pecados”; pero aún eso no es suficiente ni posible y por eso Dios nos mandó a
su Hijo, para que fuera Su dolor el que complementara la expiación de nuestros
pecados; pues por mucho sufrimiento que tengamos, nunca seríamos capaces de
hacerlo por nosotros mismos. El
cielo se consigue con dolor y los que están más cerca de Dios son aquellos a
quienes el Señor permite que sufran mayor dolor, para que ese dolor sirva de
expiación para los pecados propios… y de otros. Así se termina o se completa Su Pasión.
¡GLORIA A DIOS! ¡Gracias Señor por haberme
hecho entender esto! Eso me hizo
sentir mejor y volver a sentir al ¡Dios Vivo!, quién nos está permitiendo tener
este dolor, porque sabe que no nos vamos a desesperar y lo vamos a soportar por
amor a El y con eso, estamos colaborando a la expiación de los pecados de
otros, para que esos otros: “expíen sus pecados y salven sus almas”.
Sábado 1 y domingo 2 de marzo de 2008
Jueces
15, 15-20
Me levanté sintiéndome mejor, pero temeroso
de afrontar el fin de semana. Me
puse a preparar el programa y me habló Arturo que estaba con la garganta irritada y que no iba a
poder ir. Yo me sentí triste, pues
las lecturas de hoy me habían gustado mucho. De todas maneras, continué preparándolo y el Señor, durante
la preparación y después de todo lo que nos había pasado el día de ayer, me
dijo:
15 Encontró
una quijada de burro todavía fresca, la tomó y mató con ella a mil hombres. 16
Sansón dijo entonces: «Con quijada de burro, rociada de golpes di; con quijada
de burro, a mil hombres sacudí.» 17 Cuando terminó de hablar, tiró la
quijada; por eso se llamo aquel lugar Ramat-Lejí. 18 Entonces sintió
una sed terrible e invocó a Yavé diciendo: «Tú has logrado esta gran victoria
por mano de tu siervo y ahora voy a morir de sed y a caer en manos de los
incircuncisos.» 19 Entonces Yavé hendió la cavidad que hay en Lejí y
brotó agua de ella. Sansón bebió, recobró su espíritu y se reanimó. Por eso dio
el nombre de En Hacore a la fuente que existe todavía en Lejí. 20
Sansón hizo de líder en Israel en la época de los filisteos por espacio de
veinte años.
Esto me hizo sentir mejor y pasé el día con
más paz.
El domingo, Sylvia Regina me llamó para
decirme que el día de ayer o sea el sábado, Sylvia Ann estaba en adoración y la
Virgen le había dicho:
“Tell them that I love them. There is peace now. Tell them that a light will shine. Everything is going to be all right. Do not worry. Our Lord is here! Peace be with you!”
Todo el fin de semana pasamos con Jorge
tratando de enviar unos papeles para presentar un escrito a la corte. Yo llegué a DHL tarde el sábado y ya no
se pudieron ir. De todas maneras
hubiera llegado tarde, pero el Señor así lo quería; pues por medio de una amiga
de Verónica, el Señor obró el milagro que estuvieran en Houston hoy a mediodía
y listos para presentar el lunes. ¡GLORIA
A DIOS!
"En cuanto a la oración y meditación,
observo que el hombre prefiere no escuchar a Dios, en vez de dedicarle más tiempo a ella."
San Ignacio de Loyola
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