Portada

Portada
Canonización de Monseñor Romero

lunes, 13 de mayo de 2013

Cronología de un Milagro - Agosto 2007-II

Lunes 13 de agosto de 2007

Génesis 32, 25-32

El Señor me hizo leer lo que había escrito el 1º de enero de este año y me dijo:  25 Y Jacob se quedó solo. Entonces alguien luchó con él hasta el amanecer. 26 Este, viendo que no lo podía vencer, tocó a Jacob en la ingle, y se dislocó la cadera de Jacob mientras luchaba con él. 27 El otro le dijo: «Déjame ir, pues ya está amaneciendo.» Y él le contestó: «No te dejaré marchar hasta que no me des tu bendición.» 28 El otro, pues, le preguntó: «¿Cómo te llamas?» El respondió: «Jacob.» 29 Y el otro le dijo: «En adelante ya no te llamarás Jacob, sino Israel, o sea Fuerza de Dios, porque has luchado con Dios y con los hombres y has salido vencedor.» 
No pasó nada en todo el día, el juez no resuelve.  Temprano vino el Padre Martin y ya no pude seguir orando.  Nos fuimos a desayunar y le hablé a un amigo empresario y quedamos de juntarnos hoy a las cuatro de la tarde, para ver si nos puede ayudar con fondos para promover la Adoración Perpetua.  Fuimos a la reunión e inmediatamente nos aceptó.  El Padre estaba súper feliz y agradecido.  Era un gran momento, pues era el nacimiento de la Fundación “PACEM IN TERRIS”.  ¡GLORIA A DIOS!

Martes 14 de agosto de 2007

Hoy no pude orar, sólo resé La Llama del Amor, pues no tenía tiempo.  Ya no me acuerdo porqué no… ¡ah! era porque quería ir a platicar con una de mis hemanas, antes de ir a la reunión con Jorge.  
Estaba orando y me habló Jorge que cancelaba la reunión, así es que comprendí que lo que quería el Espíritu Santo era que fuera a hablar con mi hemana.  Antes de entrar le pedí al Espíritu Santo que me iluminara para que la reunión fuera positiva. Le pedí al Señor serenidad y me la dio.  La reunión fue neutra.  Gracias a Dios, el enemigo no triunfó y pudimos mantenerlo fuera.  El Señor nos había ayudado. 
Por la noche cenamos con el Padre Francesco y pude reír un poco, pero mi corazón se encuentra destrozado, mi única esperanza es el Señor.

Miércoles 15 de agosto de 2007

Isaías 40, 1-2
Marcos 11, 24

Me levanté sintiéndome bastante derrotado. ¿Y el Señor?  Siento que mi corazón se retuerce en el dolor, pues El no me contesta y me deja sufriendo.  Me contestó:  1 Consuelen, dice Yavé, tu Dios, consuelen a mi pueblo. 2 Hablen a Jerusalén, hablen a su corazón, y díganle que su jornada ha terminado, que ha sido pagada su culpa, pues ha recibido de manos de Yavé doble castigo por todos sus pecados. 24 Por eso les digo: Todo lo que pidan en la oración, crean que ya lo han recibido y lo obtendrán. 
Nos reunimos con Jorge para ver la presentación que había preparado y no le hizo ningún comentario, le pareció todo muy bien.  Yo sentía que era iluminación del Espíritu Santo y eso me lo confirmaba.  

Jueves 16 de agosto de 2007

No pude orar, pues pasé todo el día con el Padre Martin.  Desayunamos juntos y a las 9:00 a.m. fuimos a la reunión con otro empresario.  La reunión no fue muy buena y se mostró algo distante, al final me dijo que iban a contribuir con la mitad de lo que le habíamos pedido.  No sabemos todavía como hacer con ese ofrecimiento, pues el Espíritu Santo me sigue diciendo que la cantidad deber ser la misma para todos.
A mediodía me reuní con un amigo consultor, para estudiar la posibilidad de contratarlo como asesor en el juicio y el Señor abrió el camino para que todo fuera bien.  Después nos reunimos con otro amigo abogado y aceptó ayudarnos para formar la Fundación “PACEM IN TERRIS”.  Por la tarde fui a visitar a mis papás.

Viernes 17 de agosto de 2007

Salmo 119
Romanos 12, 17-21; 14-16

Me levanté pidiéndole al Señor que me ayude con este dolor que siento de la relación con la familia.  Me contestó:  161 Los nobles me perseguían sin razón, mi corazón temía más a tus palabras. 162 Tu palabra me llena de gozo como quien encuentra un tesoro. 163 Detesto la mentira, la aborrezco, pero eso sí que amo tu Ley. 164 Siete veces al día yo te alabo por tus juicios que son justos. 165 Una paz grande para los que aman tu Ley, nada podrá hacerlos tropezar. 166 Espero, Señor, tu salvación, y pongo en práctica tus mandamientos. 167 Mi alma toma en cuenta tus testimonios, a tu vista están todos mis caminos. 169 ¡Que mi grito se acerque a tu faz, Señor, según tu palabra, dame inteligencia! 173 ¡Que tu mano venga a socorrerme, pues yo elegí tus ordenanzas! 17 No devuelvan a nadie mal por mal y que todos puedan apreciar sus buenas disposiciones. 18 Hagan todo lo posible para vivir en paz con todos. 19 Hermanos, no se tomen la justicia por su cuenta, dejen que sea Dios quien castigue, como dice la Escritura: Mía es la venganza, yo daré lo que se merece, dice el Señor. 20 Y añade: Si tu enemigo tiene hambre, dale de comer; si tiene sed, dale de beber: éstas serán otras tantas brasas sobre su cabeza. 21 No te dejes vencer por el mal, más bien derrota al mal con el bien. 14 Bendigan a quienes los persigan; bendigan y no maldigan. 15 Alégrense los que están alegres, lloren con los que lloran. 16 Vivan en armonía unos con otros. No busquen grandezas y vayan a lo humilde; no se tengan por sabios.

Sábado 18 y domingo 19 de agosto de 2007

Deuteronomio 8, 2-5

Me levanté temeroso y cansado.  Me puse a preparar el programa y el Señor me dijo:  No olvides a Dios, cuando lo tengas todo. 2 Acuérdate del camino que Yavé, tu Dios, te hizo recorrer en el desierto por espacio de cuarenta años. Te hizo pasar necesidad para probarte y conocer lo que había en tu corazón, si ibas o no a guardar sus mandamientos. 3 … Quería enseñarte que no sólo de pan vive el hombre, sino de todo lo que sale de la boca de Dios es vida para el hombre. 4 Ni tu vestido se ha gastado, ni tu pié se ha lastimado a lo largo de estos cuarenta años. 5 Comprende, pues, que del mismo modo que un padre educa a su hijo, así Yavé te ha educado a ti. 
El domingo fuimos a jugar tenis y squash con Rober, Javi, Andrés y Diego, mis sobrinos.  Pasamos bien felices y por la tarde vimos el juego del Real Madrid.  También nos bañamos en la piscina, pasamos felices y contentos y yo le daba gracias a Dios por estos momentos, pero mi corazón estaba triste y partido; esperando en el Señor.  Fuimos a ver a mis papás y la reunión estuvo positiva.

"Si perseveramos, reinaremos con El" 

2 Timoteo 2, 8

No hay comentarios:

Publicar un comentario