Cronología de un Milagro - Julio 2007-V

Lunes 30 de julio de 2007

Ayer llegamos a Houston. Nos levantamos temprano y fuimos a misa a St. Ann.  El Señor me dijo enfrente al Santísimo: No tengan miedo; todo va a salir bien, según mi voluntad.  Después pasamos por Jorge y lo primero que me dijo es que fuéramos a St. Ann, pero ya no pudimos ir, pues era tarde. 

Nos fuimos a la corte, con Gary y Sylvia Regina, para el hearing del summary judgement ante el juez.  La presentación de Fulbright fue a todo lujo y ocupando toda la última tecnología de audiovisuales. Me llamó la atención que no hubo court reporter y nadie lo comentó.  La presentación de Jorge fue buena, pero fue evidente que no dejamos nada por escrito al Juez y que fue un error no haber hecho una presentación formal.  

Me sentí bien preocupado, pues aunque habíamos hecho una buena presentación, no iba a constar en ningún lugar lo que habíamos dicho, pues no había habido court Reporter.  Cuando se lo comenté a Jorge, me contestó que no se había dado cuenta y que había sido un error grandísimo que no hubiera.  Todos coincidimos que el Juez no podía aceptar el Motion de Nejapa Power, por todas las dudas que presenta el caso; pero si resuelve a favor de ellos, nos dimos cuenta que no tendríamos mayor forma de apelar, pues no hubo ningún registro de lo que ahí se dijo.  Todo está en manos de Dios.

Por la tarde fuimos a ver a Mincho y a Richard, ambos médicos y los dos, por obra del Señor, nos recibieron inmediatamente, pues tanto Sylvia Regian como yo creímos que era conveniente hacernos un chequeo de salud.

Martes 31 de julio de 2007

Pasamos todo el día en médicos.  Fuimos a misa St. Michael. Por la tarde nos recibió Richard y le dijo a Sylvia Regina que lo del pecho no creía que era nada malo, lo cual nos hizo sentir mejor.  A mí me hicieron el scan en la cabeza, era carísimo y estuve a punto de decir que ya no me lo hicieran, pero gracias a Dios decidimos que mejor me lo hiciera y todo salió bien.

Miércoles 1 de agosto de 2007

Nos fuimos a hacer los exámenes de Sylvia Regina en Richmond Ave., al “Image Center” y después a la clínica de Mincho, para ver los resultados.  

A mí me dijeron que todo estaba bien, pues ya habían llegado todos los exámenes y de Sylvia Regina no pudieron decir nada, pues los exámenes no llegaron a tiempo.  Por la noche fuimos a cenar con Richard y Lily al Houston Club, en Greenway Plaza.  Al mismo lugar donde, hace más de doce años, había ido a jugar tennis con Bob Hart, el presidente de Nejapa Power y solo era atenciones con nosotros.  Fue un mensaje del Señor, como para decirme que todo lo que nos había pasado era para bien y hoy comenzaba un nuevo amanecer.  Por la mañana, Sylvia Ann le dijo a Sylvia Regina que me dijera que, decía la Virgen que, hoy era un “wonderful day”.

Jueves 2 de agosto de 2007

Nos levantamos, empacamos y nos fuimos a misa.  Temprano nos llamó la Dra. Patel del consultorio de Mincho que los exámenes de mamografía de Sylvia Regina habían salido bien.  ¡GLORIA A DIOS! me acordé de lo que dijo La Virgen ayer.  En la misa, el Padre habló sobre la comparación de cuando Moisés hizo la “Tienda de las Citas” en el desierto y que por la noche había una llama ardiente y de día una nube y que desde entonces, eso era una simbología de la llama que iba a estar encendida en los templos, por la presencia del Santísimo Sacramento.  Además mencionó que hoy se celebraba el día de San Pedro Julian Eymard, que es el fundador de dos congregaciones, que se dedican a promover la Adoración Perpetua del Santísimo Sacramento y que en Houston está su iglesia “Corpus Christi”; donde hay Adoración Perpetua.

Sylvia Regina me había pasado diciendo, todo el viaje, que llamáramos al Padre Martin, para averiguar adonde había Adoración Perpetua.  Ahora el Señor nos lo contestaba.  Por la tarde tomamos el avión para regresar a San Salvador.

Viernes 3 de agosto de 2007

Me levanté y no pude orar, pues mi mente estaba en preparar la presentación para el juicio y ver cómo se podía o más bien si se podía presentar en una forma lógica, pasé todo el día en eso.  

Por la tarde fuimos a visitar a mi papá, antes de irnos al Flor.  Mi papá me contó su “gran secreto”… que acababa de averiguar, después de 95 años y que es que: "la “glande” no la tenía en el mero centro”, sino que estaba de un lado.  El descubrimiento lo tenía súper sorprendido y la reunión fue súper positiva, un regalo del Señor.  Gozamos mucho juntos.

Sábado 4 y domingo 5 de agosto de 2007

Nehemías 12, 27; 44-46

Me levanté a orar, en el Flor.  Tenía grandes deseos de escuchar al Señor, pues tengo varios días de no orar y escucharlo y me siento triste, perdido sin su guía y su camino, sin que esté seguro que estoy haciendo su voluntad.  Me sentí triste porque la decisión del Juez no llega y porque pudiera ser negativa a nosotros y que todo termine ahí.  El solo pensamiento me pone triste y me hace dudar en mi Fe, que el Juez pueda favorecer a El Paso y dictaminar en contra nuestra, más eso es no tener Fe; pues el Señor me ha dicho que vamos a ganar el caso y eso me duele más, pues es comprender que mi Fe flaquea.

Le pedí al Señor que incrementara mi Fe y me aclarara si el Juez iba a dictar en beneficio nuestro.  Me dijo:  ²⁷ Cuando se inauguró la muralla de Jerusalén, se buscó por todos los lugares a los levitas para traerlos a Jerusalén, con el fin de celebrar la inauguración con alegría, con cantos de acción de gracias y música de címbalos y cítaras. ⁴⁴ En aquellos días se nombró encargados que vigilaran las bodegas en que se almacenaban las contribuciones, las primicias, los diezmos. En ellas debían recoger de las diversas ciudades del territorio las porciones que la Ley otorga a los sacerdotes y a los levitas, pues la gente de Judá estaba feliz al ver a los sacerdotes y levitas en sus funciones. ⁴⁵ Ellos cumplían las ceremonias de su Dios y las ceremonias de las purificaciones, junto con los cantores y los porteros, conforme a lo mandado por David y su hijo Salomón, pues ya desde el principio, ⁴⁶ desde los días de David y de Asaf, habían jefes de cantores y cantos de alabanza y de acción de gracias a Dios.   Me sentí bien confundido, pues el Señor no me contestó mi pregunta, más bien me estaba confirmando la vocación de alguien de la familia al sacerdocio y que es la razón más importante de todo lo que nos ha sucedido, para que alguien encuentre su vocación.  Parecía que no me había contestado, pero en realidad sí me había contestado, pues me habló de la alegría que vamos a tener y que todo esto tiene un propósito… pero luego me dijo:  Nehemías 13, ¹ En aquel tiempo se leyó en presencia del pueblo el libro de la Ley de Moisés y se encontró escrito en él: «El amonita y el moabita jamás entrarán en la asamblea de Dios, ² porque no recibieron a los hijos de Israel con pan y agua. Dieron dinero a Balaam para que los maldijera, pero nuestro Dios cambió su maldición en bendición.  Y luego me contestó más directamente:  Némeros 22, ¹⁸ Balaam respondió a los servidores de Balac: «Aunque Balac me diera su casa llena de plata y de oro, no desobedecería la orden de Yavé, mi  Dios, no importa que fuera para una cosa pequeña o grande. ¹⁹ Sin embargo, alojen aquí esta noche, por favor, para que sepa lo que Yavé me quiere aún decir.» ²⁰  Esa noche se apareció Dios a Ballam y le dijo: «¿Así que esos hombres vinieron a invitarte? Muy bien, parte con ellos, pero sólo harás lo que te diga!» 

El domingo nos levantamos temprano para ir a misa en AGAPE.  Ahí iba a estar una buena amiga de Sylvia Regina y después se iba a venir con nosotros.  Lo sorprendente es que la amiga pudo Comulgar y fue un momento muy bonito, poderla acompañar en ese momento tan significativo.  

Después nos venimos y pasamos un día muy especial.  Estaban también aquí los consuegros Iannuzzelli.   Por la tarde me dio un dolor de cabeza como nunca me había dado como en 30 años.  Tenía años que no me daba un dolor de cabeza, excepto hace unos meses que me dio uno bien leve y hace un año otro más leve, pero éste estaba bien fuerte y me tuve que ir a acostar, pues no aguantaba el dolor.  No quise tomar nada y le ofrecí el dolor a nuestro Señor, para la salvación de otras almas.

"¿Acaso cuando contemplas toda la hermosura de este mundo, no te respondes en la misma forma: "No me he hecho a mí mismo, sino me hizo Dios?" 

San Agustín