Portada

Portada
Canonización de Monseñor Romero

domingo, 25 de noviembre de 2012

Cronología de un Milagro - Julio 2006-IV


Lunes 24 de julio de 2006

Hoy me levanté y no tuve mucho tiempo para orar.  Estaba ansioso de llegar a la oficina para ver si habían noticias de Vidal, pues presentía que el Señor nos iba dar algún “regalo”. Pero este no llegó y con John no pude hablar, pues no me corresponde mis llamadas desde la semana pasada, ¿Hasta cuándo Señor, hasta cuándo?
Por la tarde fui a la casa de mis papás. Desde que llegué sentí un ambiente negativo.  Ahí estaban mis hermanas con sus hijos y mis cuñados.  Ninguno de mis hermanos.  Me sentí triste y le pedí perdón al Señor por haber hecho eso y sentirme así.
Por la noche fuimos a la reunión del grupo y el Espíritu Santo se derramó enormemente en todas esas parejas que “andan como ovejas sin pastor”.  Terminamos como a las 12:00 p.m. Le dimos gracias a Dios por todas sus bendiciones.

Martes 25 de julio de 2006

Marcos 11, 22-24

Hoy me levanté cansado y agobiado, pues la visita de ayer adonde mi mamá me estaba agobiando.  Le pedí al Señor que me respondiera cuándo es que nos iba a componer lo de Nejapa, para que la familia se vuelva a unir y para que el Señor se glorifique en los empleados, que igualmente ya tienen más de un año de estarle pidiendo que las cosas de compongan.  Le pedí a la Virgen Santísima que interceda por nosotros, pues ella más que nadie conoce nuestro dolor.  Me contestó:  22 Jesús respondió: «Tengan fe en Dios» 23 Yo les aseguro que el que diga a ese cerro: ¡Levántate de ahí y arrójate al mar!, si no duda en su corazón y cree que sucederá como dice, se le concederá. 24 Por eso les digo: todo lo que pidan en la oración, crean que ya lo han recibido y lo obtendrán. 
Durante el día no pasó nada, sólo esperar noticias de los abogados.  No tengo nada que hacer.  Por la tarde me llegó un e-mail de John diciendo que él también estaba “esperando” noticias del Juez.  
Me fui a misa y después al Santísimo, implorando su misericordia.  Me siento agotado y… abandonado – ¡SÁLVAME SEÑOR!  He comenzado a comprender el rol de intercesión de la Virgen Santísima, que consiste en que ella, no siendo omnisciente, ni omnipotente, comprende mejor nuestras preocupaciones y conociendo el Plan de Dios, puede pedir al Señor que resuelva nuestros problemas antes de tiempo; ya que si ella se lo pide, el Señor no va a dejar de concederle la petición, pues es su madre y en la cultura de los tiempos de Jesús, la reina era la madre del rey y una petición de su madre era una orden para el rey.

Miércoles 26 de julio de 2006

Proverbios 4, 1-7

Desde el lunes me he sentido triste.  Señor, ¿Por qué no se componen las cosas? ¿Por qué todo parece estar estancado, a pesar de todas nuestras oraciones?  Ya terminamos otra Novena al Divino Niño Jesús y todo sigue igual.  Madre mía, sálvanos.  Le pedí al Señor que consolara mi dolor y desesperanza. Me contestó: 1 Hijos míos, escuchen la enseñanza de un padre, estén atentos para conocer la verdad. 2 Les doy un saber bueno, no rechacen mi enseñanza. 3 Yo mismo fui un hijo dócil con mi padre, el hijo regalón de mi mamá; 4 él me instruía entonces en estos términos: «¡Recuerda bien mis palabras; sigue mis consejos y vivirás! 5 ¡Busca la sabiduría! ¡Hazte inteligente! No olvides lo que te digo, no menosprecies mis palabras. 6 Si no abandonas la sabiduría, ésta te protegerá; ámala y velará por ti. 7 El principio de la sabiduría es correr tras ella; ¡busca la inteligencia a cambio de todo lo que tienes!

Jueves 27 de julio de 2006

Pensamientos de San agustín, pág. 166, num. 866

Me dijo:  ¿Amas la tierra? Te harás tierra. ¿Amas a Dios? Serás Dios. 
Casi no hice nada en la oficina y pasé todo el día preparando el programa del próximo sábado.  Lo grabamos a las 2:00 p.m., así que prácticamente no hice otra cosa en el día. Fuimos al Banco con Rober, a sacar el dinero para el viaje.  Por la noche, en la Asamblea, nos tocó la reflexión de la Palabra y me sentí algo embrecado.  El Señor sabrá qué pasó. Quizás me quiso enseñar que no debería ser tan soberbio y andar buscando impresionar, sino simplemente obedecer lo que el Espíritu Santo me vaya comunicando.  Fue una buena lección de humildad.

Viernes 28 de Julio de 2006

Hoy nos fuimos a Novojoa

No pude orar, pues nos levantamos temprano para irnos a Navojoa.  Gracias Señor, por concedernos este lujo de poder ir a ver a Sofía y todos juntos con Camila y Rober.  Es una bendición que el Señor nos está dando, pues yo no me hubiera imaginado que hubiéramos podido ir hace unos pocos días y ya hoy… vamos para allá.
En la mañana recibí un e-mail de John, manifestándonos que el Juez había rechazado el caso de W&S y entonces teníamos que volver a empezar en Nueva York ¿Hasta cuándo Señor, hasta cuándo?  Lo tomé bien tranquilo, confiado en que si el Señor así lo quería, pues ni modo; siempre será lo mejor y es señal que en Nueva York nos va a ir mejor.
Le mandé copia a Alex y me gustó mucho que él también me contestó en los mismos términos, aceptando con confianza la voluntad del Señor.
Durante el viaje les dimos las cartas a Camila y Rober, que les habíamos escrito en el Retiro.  Gozamos un montón durante el viaje todos juntos, yo le daba gracias a Dios por todas sus bendiciones.  Llevábamos 10 valijas, pues aprovechamos a llevarle a Sofía parte de los regalos de boda.  Llegamos a Hermosillo a las 10:00 de la noche y ver a Sofía con Poncho me dio un gusto enorme.  Me sentí muy contento que íbamos a pasar más de una semana todos juntos, ¡GRACIAS SEÑOR!
Dormimos en el hotel “El Angel” – GRACIAS SEÑOR.

Sábado 29 y domingo 30 de julio de 2006

Me levanté a orar un poco, frente a la piscina del hotel.  Hacía un poco de calor, pero no mucho.  Desayunamos todos juntos, felices y contentos.  Después nos fuimos a dar una vuelta por Hermosillo y a Liverpool a comprar algunas cosas, nos dieron unos tiquetes para una rifa de un Hummer.  A ver si el Señor nos da algún regalito para Sofía.  Luego nos venimos para Navojoa y pasamos a conocer San Carlos y Guaymas.  San Carlos me gustó muchísimo.
Llegamos a la casa de Sofía y me gustó mucho y me sentí muy orgulloso de ella; pues todo refleja su personalidad ya asentada y contenta. Le di gracias al Señor por haberla bendecido.  Me da tristeza tenerla lejos, pero viendo su casa y verla contenta con Poncho me llenó de mucha confianza y alegría que el Señor está con ella.  Nos acostamos temprano, pues estábamos muertos de cansancio y ya no oramos.  Fue primer día, en mucho tiempo, que no oramos antes de dormirnos, pero le pedimos perdón al Señor, pues estábamos bien cansados.
El domingo nos levantamos a misa y después fuimos a Las Bocas, ahí llegaron los suegros de Sofía y pasamos un día muy alegre y placentero.  También llegó el tío Julián a saludarnos y pasarse un rato con nosotros.  El atardecer estuvo lindísimo, ¡un regalo de Dios! ¡GRACIAS SEÑOR!


"Por la caridad habita en nosotros toda la Trinidad. Ves la Trinidad, si ves la caridad."

San Agustín - 867 y 868

No hay comentarios:

Publicar un comentario