Lunes
13 de noviembre de 2006
Liturgia
de las horas IV, pág. 502
Job
20, 4-7 – job 42, 5-6
Me levanté a
orar, pidiéndole al Señor su misericordia y su luz, para saber qué hacer y
terminar el memo a Vidal. Me
dijo: Envueltos,
pues, y rodeados de oscuridad, nuestra vida estaba recubierta de tinieblas y
Cristo quiso que nuestros ojos se abrieran de nuevo y así la nube que nos
rodeaba se disipó. 4 No sabes tú que desde siempre, desde que fue
puesto el hombre sobre la tierra, 5 el triunfo del malvado es breve
y el gozo del perverso no dura más que un instante? 6 Aunque se eleve
hasta los cielos y toque las nubes con la cabeza. 7 Como un fantasma
desaparece para siempre. 22, 21
Reconcíliate, pues, con Dios, haz las paces y te resultará bien. 23
Si vuelves al Omnipotente con humildad, si alejas de tu tienda la injusticia, 24
si estimas el oro como polvo y como guijarros los ríos dorados, 25
entonces el Omnipotente será tu oro, y para ti, será plata a montones. 28, 1 La plata tiene su mina
el oro un lugar donde se purifica. 2 El hierro se extrae de la
tierra, una piedra fundida se hace cobre. 12 pero la sabiduría, ¿de
dónde viene, dónde se hallará la inteligencia? 13 Ignora el hombre
su camino, no lo encontrará en la tierra de los vivos. 18 Conseguir
la sabiduría vale más que extraer perlas. 20 Entonces ¿la sabiduría
de dónde sale?… 23 Sólo Dios conoce su camino, sólo él sabe dónde
está. 28 Entonces dijo al hombre: “Mira, el temor del Señor es la
sabiduría: y huir del mal es la inteligencia.” 42, 1 Y Job respondió a Yavé: 2 «Reconozco
que lo puedes todo, y que eres capaz de realizar todos tus proyectos. 5
Yo te conocía sólo de oídas; pero ahora te han visto mis ojos. 6 Por
esto, retiro mis palabras y hago penitencia sobre el polvo y la ceniza.»
Nos reunimos
con Alex para terminar el escrito a los abogados y la reunión fue positiva.
Antes de mandarlo, lo bendijimos con agua bendita con Sylvia Regina, era la
1:30 p.m. Como a las 5:00 recibí un e-mail de Vidal que ya lo había recibido y
nos iban a contestar mañana, luego era positivo.
Martes
14 de noviembre de 2006
Mateo
5, 25
Ayer en la
noche fuimos a la cena del 10º Aniversario del Club Eagles, con Rober. Me emocioné bastante, pues pude sentir
la presencia de Dios y a cada persona verle su alma, en forma de Angel
Custodio. Hoy me levanté a orar y el
Señor me dijo: 25 Trata de llegar a un
acuerdo con tu adversario mientras van todavía de camino al juicio. ¿O
prefieres que te entregue al juez, y el juez a los guardias, que te encerrarán
en la cárcel?
Estaba en la
oficina esperando noticias de Vidal, cuando llegó Guadalupe y me comunicó que
abajo estaban unos abogados que llegaban a embargarnos de parte de un proveedor
y que ya estaban adentro del edificio. Decidí no atenderlos y ellos decidieron quedarse en el
edificio hasta que alguien los atendiera. Llegó la hora del mediodía y todos se fueron a almorzar y
ellos se quedaron ahí y yo no podía salir. A mediodía, yo sin poder salir, pues allá abajo estaban los
abogados, recibí una llamada de Lorena y no la pude contestar, de Guayo y
tampoco. Al rato me habló Sylvia
Regina y me dijo que Lorena y Guayo me habían estado tratando de controlar,
pues mi papá estaba bien grave y se lo habían tenido que llevar al hospital. Yo no podía salir. Se me ocurrió decirles a los abogados
que los iba a atender a las 11:00 a.m. al día siguiente y con esta promesa, al
fin se fueron -eran ya como las 4:00 de la tarde- Llegué al hospital y al ver a mi papá se me salieron las
lágrimas, pues lo vi bien demacrado y como sin vida, como que su alma ya se
había ido. Fue un momento de
encontrarme con la promesa del Señor, que nuestra alma estará en la presencia
del Señor. Gracias a Dios, a los
pocos minutos, menos de una hora, se repuso y supieron que era una infección en
la vesícula y que había que intervenirlo. Yo resé varios Rosarios por su salud y la familia. Lo dejamos por la noche más recuperado.
Miércoles
15 de noviembre de 2006
2
samuel 21, 1
Isaías
41, 13-14
1 En tiempo del rey David hubo
una gran hambre que duró tres años seguidos. David hizo la consulta a Yavé y la
respuesta fue: «Hay una maldición sobre Saúl y su descendencia, porque mató a
los gabaonitas.» 22, 1 David dirigió a Yavé
las palabras de este cántico cuando éste lo libró de Saúl y de todos sus
enemigos. Dijo: 2 «Yavé es mi roca y mi fortaleza, mi libertador y
mi Dios. 3 El es la roca en que me asilo, mi escudo, mi salvación,
mi fortaleza y mi refugio. 4 Invoqué a Yavé, digno de alabanza, y me
encuentro libre de mis enemigos. 6 Los lazos del Lugar Oscuro me
rodeaban, veía delante de mí trampas de muerte. 7 En mi angustia
clamé a Yavé. Invoqué a mi Dios, desde su templo oyó mi voz. 18 Me
libra del enemigo poderoso, de mis adversarios, demasiado fuertes para mí. 19
Ellos me asaltaban el día de mi desgracia, pero Yavé fue mi protección. 24
De nada se me puede acusar delante de él y me mantengo lejos del pecado 25
y Yavé me recompensa según mi justicia y conforme a la pureza de mis acciones
ante él. 49 Tú me salvas de mis enemigos. Tú me elevas por encima de
mis agresores y me libras de los hombres violentos. 50 Por eso te
alabaré en medio de los paganos y quiero cantar a tu Nombre. 51 Yavé
multiplica las victorias de su rey y muestra su bondad a su ungido, a David y a
su descendencia, para siempre.»
Me fui a ver a
mi papá y se había mejorado bastante. Llegué a la oficina y recibí a los abogados y… al final no
nos pusieron el embargo y sólo me dijeron que iban a hablar con su cliente y
explicarle la situación – ¡GLORIA A DIOS! Cuando iba subiendo a mi oficina, Marco Tulio me dijo
sorprendido y ¿qué pasó Ingeniero, se fueron? ¿No hicieron nada? y yo le dije
que sí así era y que era todo por GLORIA A DIOS que había escuchado nuestras
oraciones. Todos los empleados se
pusieron contentos y felices, pues todos oyeron mi respuesta al subir. Guadalupe, mi secretaria, me dijo que
ella ya sabía que así iba a resultar todo, pues al momento que yo bajaba, ella
estaba pasando a máquina el día 25 de diciembre de 2004 de mi Diario, que
dice: 13 Yo Yavé, soy tu Dios, te tomo de
la mano y te digo: No temas, que yo vengo a ayudarte. 14 No temas, raza
de Jacob, más indefensa que un gusano. Yo soy tu socorro, dice Yavé, el Santo
de Israel es el que te rescata.
Jueves
16 de noviembre de 2006
Hebreos
5; 2, 6-7
5 En efecto, ¿a qué ángel le
dijo Dios jamás: Tú eres mi Hijo, yo te he dado la vida hoy? ¿Y de qué ángel
dijo Dios: Yo seré para él un Padre y él será para mí un Hijo? 2,
6 Alguien dijo en algún lugar: ¿Qué es el hombre para que te
acuerdes de él, el Hijo del hombre para que lo tomes en cuenta? 7
Por un momento lo hiciste más bajo que los ángeles y luego lo coronaste de
gloria y honor; 8 todo lo pusiste bajo sus pies.
Viernes
17 de noviembre de 2006
Lucas
15, 28-32
Me levanté a
orar, pidiéndole al Señor que me dé fortaleza, que me haga sentir su amor, pues
me siento solo al sentir que la mediación no avanza y sólo esperamos,
“esperamos” en el Señor. Me
contestó: 28 El hijo mayor se
enojó y no quiso entrar. Su padre salió a suplicarle. 31 El padre le
dijo: «Hijo, tú estás siempre conmigo y todo lo mío es tuyo. 32 Pero
había que hacer fiesta y alegrarse, puesto que tu hermano estaba muerto y ha
vuelto a la vida, estaba perdido y ha sido encontrado.»
Me fui a ver a
mi papá y estuve solo con él por varias horas. Sólo se me quedaba viendo, ¿qué estaría pensando? Hablamos con Carmen Elena de cómo no nos
entendemos cuando hablamos y la conversación fue positiva, pero entró Luis
Eduardo y ya no pudimos continuar. Por la tarde recibimos otro e-mail de Vidal, diciéndonos que
la mediación continúa y que el juez no puede parar la venta de las acciones de
El Paso en la planta, pues habría que poner un “bond” y nosotros no tenemos
dinero para hacerlo. Me sentí bien
mal, pues todo era una sorpresa y de nuevo, se nos coloca en una situación sin
salida. ¡Clamé a Dios! ¿Señor,
Señor, adónde estás que no te veo? Todo se nos torna oscuro y por el otro lado, todas Las
Palabras de estos días son de que ya todo acabó y todo se va a componer. Señor,
ayúdame a comprender y dame fortaleza.
Me fui a misa,
al casamiento de la hija de Rudy y sentía un dolor inmenso, pero se lo dediqué
al Señor. Comulgué en la misa y durante
la recepción, un amigo se me acercó a decirme que su hijo le había preguntado,
al momento de la comunión, que ¿por qué ese señor agarra la hostia de esa
manera? Entendí que era ¿porqué
con tanta devoción?, era el Señor consolándome.
Sábado
18 y domingo 19 de noviembre de 2006
Juan
6, 67-70; 7, 6
Me levanté a
orar, pidiéndole al Señor que me ilumine para saber qué hacer, pues todo se
mira “negro” y sin salida. Le
pregunté al Señor ¿qué quieres que haga? Me contestó: 67 Jesús preguntó a los
Doce: ¿Quieren marcharse también ustedes?
68 Pedro le contestó: «Señor, ¿a quién iríamos? Tú tienes
palabras de vida eterna. 69 Nosotros creemos y sabemos que tú eres
el Santo de Dios.» 70 Jesús les dijo: «¿No los elegí yo a ustedes, a
los Doce? Y sin embargo uno de ustedes es un diablo.» 71 Jesús se
refería a Judas Iscariote, hijo de Simón, pues era uno de los Doce y lo iba a
traicionar. 7, 6 Jesús les contestó: «Todavía no ha llegado mi
tiempo, mientras que para ustedes todo tiempo es bueno. 7 El mundo
no puede odiarlos a ustedes, pero a mí sí que me odia, porque yo muestro que
sus obras son malas.
Por la tarde,
nos reunimos todos los hermanos en el hospital con mis papás y la reunión fue
positiva.
El domingo nos
levantamos temprano para ir a dar el servicio a la Comunidad “Cacha de Oro”,
que es un caserío como olvidado del mundo en las costas cerca de Sihuapilapa y
pude sentir al Espíritu Santo cuando estábamos subiendo la montaña, para llegar
al lugar. Vimos el mar y las
playas; “la magnificencia de Dios”. Me tocó hacer la oración de entrada y cantamos “Juntos como
hermanos”, pues había llevado la guitarra. Me sentí bien triste que no pudimos ver el DVD de la Virgen
de Guadalupe, pues habíamos llevado todo el equipo para proyectarles cine a los
niños; sobre todo porque sabía que Sylvia Regina estaba bien emocionada por
mostrárselos a los niños y se sintieran felices. Resulta además, que toda la comunidad es bien Guadalupana y
la foto de Juan Diego, el vidente de la Virgen, estaba en el altar. Me sentí triste. Después me puse a pensar que el Señor
había permitido eso para que regresemos a presentársela el próximo 17 de
diciembre, que es el Día en que les vamos a celebrar la Primera Comunión a todos
los niños que puedan hacerla y ese mismo día celebran el Día de la Virgen de
Guadalupe; que es el 12 de diciembre. Pasamos un día bien contentos y lleno del Espíritu Santo.
"A todo hombre que se ha convertido a Dios se le cambia el deleite, se le cambian los gustos; no se le quitan, sino se le mudan."
San Agustín
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