Lunes 1 de Marzo de 2004
Salmo 44
1 Pedro 1, 6-7
24 Despiértate ¿Por qué duermes Señor? ¡Levántate y ven a socorrernos! 25 ¿Por qué escondes tu cara? ¿Olvidas nuestra opresión, nuestra miseria? 26 Nos arrastramos por el polvo y a la tierra se pega nuestro vientre. 27 Levántate, Señor, y socórrenos, acuérdate de tu bondad y líbranos! 1, 6 Por eso estén alegres, aunque por un tiempo tengan que ser afligidos con diversas pruebas. 7 Si el oro debe ser probado pasando por el fuego y es sólo cosa pasajera, con mayor razón su fe, que vale mucho más. Esta prueba les merecerá alabanza, honor y gloria el día que se manifieste Cristo Jesús.
Hoy amanecí pidiéndole a Dios que me dé fuerzas para soportar esta prueba, pues sobre todo me mortifica el no poder pagar los salarios a los empleados. Me hablaron temprano para manifestarme que se había muerto Mercedes Nóchez, que era la contadora de Schwartz y fui al velorio. Me dolía el corazón de ver a todos los ex-empleados ahí y yo sin poder hacer nada para consolarlos, pues la mayoría no tiene enpleo. Cuando menos, a Mercedes le pudimos enviar una corona de parte de la empresa. Oré por su alma y porque el Señor nos ayude a los que todavía nos tiene aquí.
A mediodía hablamos con Sofía sobre los gastos del matrimonio, pues no tenemos casi nada y gracias a Dios la conversación fue positiva.
Por la noche fuimos a la reunión del grupo para el Retiro 40 y le daba gracias a Dios por permitirnos servirle, pues siento que es como orar dos veces. Es como que El me está diciendo: “Este es el camino… tú camino”, “Para esto te he estado preparando”
Martes 2 de Marzo de 2004
Isaías 55, 1-13
Apocalipsis 3, 17-22
Hoy me levanté pidiéndole al Señor que me ayudara y me diera fuerzas, pues el no poder pagar las planillas me tiene devastado. El en su misericordia me contestó: 55, 1 A ver ustedes que andan con sed y vengan a las aguas! No importa que estén sin plata, vengan, pidan trigo sin dinero y coman, pidan vino y leche sin pagar. 3 Atiéndanme y acérquense a mí, escúchenme y su alma vivirá. Voy a hacer con ustedes una alianza para siempre, para darles los bienes que tengo prometidos a David. 6 Busquen a Yavé ahora que lo pueden encontrar; llámenlo ahora que está cerca. 8 Pues sus proyectos no son los míos y mis caminos no son los mismos de ustedes, dice Yavé. 10 Como baja la lluvia y la nieve de los cielos y no vuelven allá sin haber empapado la tierra, sin haberla fecundado y haberla hecho germinar, para que dé la simiente para sembrar y el pan para comer, así será la palabra que salga de mi boca. No volverá a mí con las manos vacías sino después de haber hecho lo que yo quería y haber llevado a cabo lo que le encargué. 3, 17 Tu piensas: “Soy vivo, tengo de todo, nada me falta” y no te das cuenta de que eres infeliz, digno de compasión, pobre ciego y desnudo. 19 Yo reprendo y corrijo a los que amo, vamos anímate y conviértete; 20 Mira que estoy a la puerta y llamo: Si uno escucha mi voz y me abre, entraré en su casa y comeré con él y él conmigo. 21 Al vencedor, lo sentaré junto a mí en mi trono, del mismo modo que yo, después de vencer, me senté junto a mi Padre en su trono. Sentí el llamado del Señor y yo respondí: “Haz de mí según tu Palabra”.
Le di gracias a Dios por sus bendiciones. En la tarde me habló la ejecutiva del Banco de Alex, para decirme que mañana le iba a presentar al presidente lo que ella piensa de nuestra carta. ¡Señor, haznos el milagro! Sobre todo por el personal de Schwartz y para Tu gloria.
Miércoles 3 de Marzo de 2004
Hoy no pude orar, pues fuimos a la presentación del libro del Padre Mucci. El Señor me llevó ahí, pues sentí que nuestra presencia fue un gran apoyo para el Padre, que también lo veo bastante deprimido.
Después me fui a la oficina y el ejecutivo del Banco me había hablado, para discutir el documento. Fui a su oficina y por fin, su abogado y nuestro abogado en Houston, por voluntad de Dios, tienen un documento más o menos aceptable que firmar para conseguir el financiamiento que necesitamos. Fue como la respuesta de Dios a Su palabra de ayer, que iba a hacer conmigo “una alianza, para siempre” y yo acepto Señor a volverme Apóstol de Tú Palabra y promoverla por todo nuestro país.
Sólo me queda pendiente esperar la resolución del Banco de Alex. Si es positiva, eso nos resuelve también el problema de Alex y sería como una bendición muy especial del Señor para toda la familia y como para reafirmarnos que está con nosotros; ¡Que se haga Su voluntad!
Además, dentro de las sorpresas positivas, recibí la visita de mi hermana, la cual agradecí mucho y fue como otro llamado del Señor a que nos reconciliemos y busquemos de nuevo el amor entre hermanos.
Por la noche tuvimos la reunión de “Encuentros” en nuestra casa y sentí las bendiciones del Espíritu Santo hacia toda la familia, por la presencia de todas esas personas servidoras del Señor y de las cuales ahora, por su voluntad, hemos pasado a formar parte y sentí como el Señor me decía: “Para esto te he estado preparando. Este ministerio es nuestra alianza para siempre”.
Jueves 4 de Marzo de 2004
1 Corintios 12, 1-10
12, 1 Ahora hermanos, les recordaré lo siguiente respecto a los dones espirituales 3… nadie pude decir: Jesús es el Señor! sino con un Espíritu Santo. 5 Hay diversos ministerios, pero el Señor es el mismo; 6 Hay diversidad de obras, pero es el mismo Dios quien obra en todos. 7 La manifestación del Espíritu Santo que a cada uno se le da es para provecho común. 8 A uno se le da, por el Espíritu, palabra de sabiduría, a otro palabra de conocimiento, según el mismo Espíritu; 9 A otro el don de la fe por el Espíritu … 10… a otro, interpretar lo que se dijo en lenguas.
Sentí que el Señor me confirmaba su alianza conmigo y que es concederme el “don de la profecía”, para salvar más almas y que ese es el ministerio que El me ha confiado y para lo cual me ha estado preparando todos estos años. ¡Señor, que se haga según Tu Palabra, dame fuerzas Señor!
En la oficina no pasó nada, sólo que el Señor me iluminó y mandé la carta-aprobación que Vidal había aprobado con los Bancos, pues el Espíritu Santo me iluminó y me dijo que eso era lo que tenía que hacer.
Me recordé lo que el Padre Fernando me había dicho en alguna oportunidad: “La solución va a venir de donde menos la espera” y esto se confirmaría si al final la solución, tanto de nosotros como de Co-Urban viene del Cuscatlán, pues además nos arreglaría el problema con Consorcio Colón y sus socios.
La reunión de Junta Directiva fue positiva y nos reunimos con un abogado amigo y la reunión fue también positiva.
Viernes 5 de Marzo de 2004
Hechos 2: 25-28
Hoy fue un día bastante difícil, pues no pude orar porque tenía que mandar unos papeles temprano al ejecutivo del centror comercial. Hoy arreglamos con ellos… gracias al Señor, sobre uno de los locales comerciales. El arreglo fue amistoso y bueno y no hay duda que el Señor nos ayudó para que nuestros puntos de vista se comprendieran. Por lo demás, no se resolvió nada, no pasa nada y el no poderle pagar al personal me empieza a desesperar, pues no veo ya por dónde vamos a resolver el problema. ¿Señor, qué quieres que haga? Hoy hice ayuno y a las 3:00 p.m. fui al Santísimo a rezar el Rosario de la Divina Misericordia.
Después de misa nos pusimos a orar y le pedimos al Señor que nos guiara con Su palabra, nos contesto: 25 Escuchen lo que David decía a su respecto: veo constantemente al Señor delante de mí, está a mi derecha para que no vacile. 26 Por eso se alegra mi corazón y te alaba muy gozoso y hasta mi cuerpo esperará en paz. 27 Porque no me abandonarás en el lugar de los muertos ni permitirás que tu santo experimente la corrupción. 28 Me has dado a conocer los caminos de la vida, me colmarás de gozo con tu presencia.
El está con nosotros y es todo lo que nos debe importar, pero siento Señor un gran dolor de ver a Sylvia Regina así. ¡Ten misericordia de nosotros!
Sábado 6 y domingo 7 de Marzo de 2004
Cantar de los Cantares 5: 1-8
Me levanté temprano e hice ánimos y me fui a jugar tenis con Roberto Adriano. Pasamos felices y él cada día está jugando mejor… hoy me ganó, así es que voy a tener que empezar a mejorar, para que no se aburra de jugar conmigo.
Regresamos a la casa y no tenia más deseos que sentarme a orar y escuchar La Palabra del Señor y tener su compañía. Me reconfortó diciéndonos, pues también era para Sylvia Regina: 23 Anoche estuvo a mi lado un ángel de Dios a quien pertenezco y a quien sirvo 24 y me dijo: “Pablo no tengas miedo, comparecerás ante el César y Dios te concede la vida de todos los que navegan contigo” 25 “Animo, pues, amigos míos: Yo confío en Dios y todo sucederá tal como me ha dicho. 26 Acabaremos en alguna isla”. Sylvia Regina pasó en cama todo el día, sintiéndose bastante mal. Por la tarde me fuí donde Alejandro Bolaños a ensayar los cantos que vamos a tener en el Retiro y todo salió muy bien y me sentí bien de poder cantarle al Señor. Sylvia Regina me hizo falta.
Por la mañana del domingo me puse a orar después del desayuno y le pedí al Señor que me iluminara con Su palabra para Sofía. El me contestó que le dijera: 5, 1 EL He entrado en mi huerto, hermana mía, novia mía, he tomado mi mirra con mi perfume … 5, 2 ELLA Yo dormía, pero mi corazón estaba despierto, oí la voz de mi amado que me llamaba: “Ábreme, hermana mía, compañera mía, paloma mía, preciosa mía, que mi cabeza está cubierta de rocío y mis cabellos de la humedad de la noche” 5, 4 Mi amado metió la mano por la cerradura, ¡Cómo se me estremeció el corazón! 5, 5 Me levanté para abrir a mi amado y mis manos destilaron mirra, corrió mirra de mis dedos… 5, 6 Abrí a mi amado, pero mi amado ya se había ido, se me fue el alma tras El! Lo busqué y no lo hallé, lo llamé y no me respondió. 5, 7 Me encontraron los centinelas, los que andan de ronda por la ciudad, me golpearon y me hirieron… 5, 8 Hijas de Jerusalen, yo les ruego por si encuentran a mi amado … ¿Qué le dirás? Que estoy enferma de amor.
En el desayuno, Sylvia Regina había estado hablando con Sofía de que fuera al Retiro de la Comunidad de San Pablo, que es el próximo fin de semana. El la está llamando. Ojalá que vaya, pues estoy seguro que le esperan grandes bendiciones; sobre todo hoy que va a estar lejos de nosotros.
"No hagas crítica negativa: cuando no puedas alabar, cállate."
ResponderEliminarSan JoséMaría Escrivá de Balaguer