El pasado mes de Abril pasará a la historia como
uno de los meses mas negros en contra de la democracia de nuestro querido
país. Algunos sostienen que lo
actuado por los señores diputados es inconstitucional, otros sostienen que la
democracia es solo cuestión de “aritmética” legislativa (sin ética). Lo que es incuestionable es que, cuando
menos, la actuación de los anteriores diputados fue un “abuso” de poder; pues
según el diccionario de la “Real Academia Española”, en términos legales, “abuso”
significa: “el ejercicio de un derecho en sentido contrario a su finalidad
propia y con perjuicio ajeno”.
De ahí que en el mejor de los casos, el que la
Asamblea Legislativa anterior haya elegido a nueve magistrados de la Corte
Suprema de Justicia, aparte de ser antiético, es cuando menos un “abuso”, pues
esta decisión ha perjudicado el derecho que tiene la actual Asamblea
Legislativa de elegir a un tercio de los magistrados. Igualmente, el nombramiento anticipado del Fiscal General de
la República ha perjudicado el derecho legítimo de los actuales diputados de
poder elegir a dicho funcionario y por último, pero no por esto menos
importante, el aumento decretado en los salarios de los diputados perjudica el
ingreso de otras dependencias del Estado; puesto que el presupuesto del
gobierno ya fue aprobado el año pasado y este no contempla los nuevos incrementos. Aunque este aumento fue derogado
posteriormente por presiones de la ciudadanía, eso no quita el “abuso” inicial
que hubo y el cual es repudiable.
Corresponderá a la Sala de lo Constitucional
determinar, en los próximos días y en calidad de urgencia, sin lo actuado por
los anteriores diputados es o no constitucional. Sin embargo, independientemente de esta resolución, lo que
es indudable es que: sí fue cuando menos un “abuso” de la anterior legislativa y
por lo tanto conviene preguntarnos que es lo que este hecho nos va a causar a
todos los salvadoreños en el futuro, puesto que ya íbamos encaminados en un
proceso democrático bastante avanzado; pero que ahora, los eventos del pasado
mes de Abril como que hacen pensar que quizás esto no es así, pues se ha
perdido el elemento principal que se pierde cuando se comete un “abuso” y que
es la “confianza”; la cual es un elemento esencial para la convivencia armónica
y democrática de un país.
Por el momento, quizás la dirigencia de los
partidos políticos, que “aritméticamente” ostentaron el poder el pasado mes de
Abril, pudieran sentirse contentos que han salido triunfadores y los
funcionarios electos pudieran pensar que el ser electos fruto de un “abuso” no les
trae consecuencias y que independientemente de esto, ya una vez en sus cargos van
a poder realizar sus funciones con normalidad y obedeciendo su propia
conciencia; libres de los compromisos con los partidos que los nombraron. Sin embargo, con el correr de los
tiempos y sobretodo después de ser testigos de la destitución de uno de los
magistrados de la Sala de lo Constitucional porque: “tenemos más simpatía por
otro”, como dijo un reconocido diputado del FMLN, a pesar que ha sido elegido
por seis años más; pronto nos iremos dando cuenta del enorme daño que se le ha
hecho a la institucionalidad democrática de nuestro país y que esto generará
que, a raíz de la desconfianza generada en el proceso democrático, los empresarios
privados nacionales y extranjeros, van a reducir sus inversiones en el futuro
inmediato y por lo tanto se dejarán de generar cientos y cientos de empleos;
los cuales nuestra juventud está necesitando desde hace ya varios años.
Muchos dirigentes políticos, tratando de justificar
lo actuado, han argumentado que ya en el pasado han ocurrido “abusos” similares
al que acabamos de presenciar y lo cual, desgraciadamente es cierto; pero
tampoco justificable. Sin embargo,
la pregunta que se hace la mayoría de salvadoreños es: ¿y qué pasó con la
promesa del FMLN de cambiar la forma de gobernar? Es más, después de más de veinte años de firmados los
Acuerdos de Paz, lo que a estas alturas la mayoría de la población espera es
que ya todos los dirigentes políticos, no solo los del FMLN, comprendan que
este cambio no solo es necesario y urgente, para buscar un desarrollo económico
y social sostenido; sino que además el cambio no solo debe ser de cambiar por
cambiar y por supuesto para mejorar, sino por sobretodo debe ser un cambio para
ayudar a los más necesitados, tratando de comprender sus necesidades para
aprender de ellos y comprometerse para solucionar los grandes problemas de
nuestro querido país y no solo el de unas pocas personas.
"Todas las páginas de la Escritura hablan de la caridad. No hay camino más sublime que el de la caridad, y por él solo andan los humildes."
ResponderEliminarSan Agustín,