Cronología de un Milagro - Octubre 2002-III

Lunes 14 de Octubre de 2002

Hoy me levanté temprano para ir a hacer la carta a Don Alfredo y cuando llegué a la oficina, la computadora no leyó el diskette y todo se atrasó.  Alex se puso bastante nervioso y yo igual, pues el tiempo era importante, yo le pedía a Dios que me diera serenidad y se hiciera su voluntad y en medio de toda esa confusión me empezaron a entrar como 5 ó 6 mensajes escritos a mi celular que decían “Yo confío en ti” y sentí que era un mensaje del Señor, que me decía que todo iba a salir bien.

Después supe que era Sylvia Regina la que me los mandó: “Mi Angel Guardián!”.

El día terminó sin ninguna consecuencia y yo bastante deprimido. 

Me fui a misa y al Santísimo y le pedía que me iluminara y me diera fuerzas para saber qué hacer y afrontar su voluntad, pues ya no sé como vamos a salir adelante. Para colmo de males, cuando quise comprobar si la carta la había recibido Don Alfredo me dijeron que había fallecido un hermano de él y que no iba a llegar, sino hasta el próximo lunes.  Todo se vuelve a atrasar, Señor:  “enséñame a saber llevar mi cruz”.

Fuimos a la reunión de “Encuentros” y me sentía bastante deprimido.  Leímos la parábola del hijo pródigo y sentí que el Espíritu Santo me hacía concentrarme en el hijo mayor, no sé por qué.  En el Santísimo, le pedí que me iluminara para saber el nombre de mi Angel Guardián, como me había sugerido Sylvia Regina y me dijo que era “Luis”.

Martes 15 de Octubre de 2002

Hoy fuimos a dejar a Sofía, le daba gracias a Dios porque todavía podíamos pasar juntos y tener estos momentos de unión de la familia.  Al regreso le pedí a Sylvia Regina que rezáramos el Rosario y sentí como dar testimonio enfrente de Miguel Angel; ya no me dio pena, sino que sentí orgullo de dar el ejemplo y ojalá que eso lo acerque a Dios.

Pasé un día bastante deprimido, pero con Fe de lo que me dijo el Padre Fernando, que “de donde menos lo esperamos, va a venir la solución”.  Hablé con Jaime Alvarez y me salió bien positivo y colaborador, pero aclarándome que él creía que esta semana no se podría hacer nada.  Hablé con Alex e igual de deprimido, pues tampoco pasa nada por el lado de Consorcio Colón, ya casi no quiero ir a la oficina; pues ya no podemos pagar ni las planillas y prácticamente no tengo nada que hacer.

Fui a misa por la tarde y sentí una gran paz, sobre todo en el Santísimo, tanto que no me quería venir y le decía al Señor:  “Que bien se está aquí”.  Sentí un gran deseo de rezar el Rosario, lo rezamos con Sylvia Regina ya en la noche y sentí un mensaje de consolación. Le di gracias a Dios porque mi mamá había salido bien de sus exámenes, que es un milagro del Divino Niño Jesús, que hoy terminamos la Novena con esta petición por mi mamá.

Miércoles 16 de Octubre de 2002

Hoy almorzamos con Alex y la reunión fue bastante positiva y por último, me sorprendió que ahora fue él quien me dijo que había que tener Fe en el Señor.  Me contó el testimonio del Doctor de su Grupo de Oración, de la señora que estaba en el hospital inundada de cáncer y que se curó, después que él le había dicho que le pidiera a Dios que la curara. 

Por la noche fuimos a la cena del Padre Fernando y sentía la presencia de Dios y la alegría de poderle servir.  Sentí que ese es mi llamado y me dio confianza en Dios que todo se iba a arreglar; para que yo le pueda servir y me pueda dedicar a dar testimonio de la Palabra de Dios.

Rezamos el Rosario de Sanación, pidiendo por mi mamá y la reunión con Nejapa Power.

Jueves 17 de Octubre de 2002

Hoy viajamos a Houston y le daba gracias a Dios porque nos mantiene juntos con Sylvia Regina, que es como mi “muleta”, dentro de todo este valle de lágrimas.  No sé que haría sin ella, pues me sentiría bien solo.

Nos reunimos con los abogados y decidimos no notificarle a Nejapa Powe sobre la demanda hasta mañana, para ver que pasaba en la reunión.

Sentí no haber podido ir a misa, ni a visitar al Santísimo.

Viernes 18 de Octubre de 2002

Tuve la reunión con Nejapa Power y sólo me recibió Steve; lo cual no era la primera vez que ocurría, luego no es una buena señal y me dijo que Nadeem andaba en Asia, vendiendo las plantas de Asia y Mark Croke andaba en la Dominicana, vendiendo la planta o sea ya firmando. (después supe que esto era mentira)

Al final, le pregunté por Bob Powell e inmediatamente me dijo que andaba en Nueva York y lo mismo me dijo que Debbie había pedido su día libre o sea, nadie se queria reunir conmigo.

Al llegar al hotel llamé a Bob Powell y me dijeron que estaba en una reunión y le dejé un mensaje diciendo lo que me había dicho Steve y que me llamara.  Después llamé a Nadeem y me contestó Debbie.

Almorcé con Vidal y Kent y quedamos de notificar a Nejapa Power esa misma tarde. Ellos me dijeron que de seguro se iban a alarmar y me iban a tratar de contactar el fin de semana.

Hablé con mi mamá en la noche y el médico no la había llamado o sea que es buena señal.  Tengo confianza en Dios, que así va a ser.

Sábado 19 y domingo 20 de Octubre de 2002

Me pasé todo el sábado esperando la llamada de Nejapa Power, como me habían dicho los abogados y nunca vino.

Fuimos a misa de 6:30 en St. Michael’s y se me salieron las lágrimas cuando tomé el vino, pues me sentí que era bien especial para Dios y daba gracias a Dios por todas las bendiciones que nos daba y la noticia de lo de mi mamá, que aparentemente no es nada serio.

El domingo nos levantamos tarde y lo primero que hice fue ir a recoger mi “travel kit” de oraciones, que había dejado desde mi viaje anterior, sentí una gran alegría haberlo recuperado.

Regresamos y en el avión comencé a leer el libro sobre la “Parábola del Hijo Pródigo” y de nuevo, le daba gracias a Dios por sentirlo tan cerca, a la vez que le pedía que nos saque adelante, para poderme dedicarme a ayudar para que más gente lo conozca.

Al llegar a la casa, me encontré con la realidad cruda y lo que estoy seguro son acciones del maligno para desesperarme, pues Alex me había mandado una carta sugiriendo que tomáramos decisiones en Schwartz ya. Esto me deprimió bastante, pues no sé como lo voy a rebatir, pues el único argumento que me queda es la Fe.

Le hablé a Alex y quedamos de almorzar mañana.