Cronología de un Milagro - Agosto 2003-III

Lunes 18 de Agosto de 2003

Pasamos todo el día viajando hacia El Salvador.  Seguí leyendo el libro sobre:  “Para ti, quién es Jesús”, que me ha fascinado.

Vengo preocupado y con temor de venir a afrontar esta realidad de nuevo.

Le pedía a Dios que me diera fuerzas para saber llevar mi cruz y para amarla; además para saber cual es su voluntad.

En el avión resé el Rosario.

Martes 19 de Agosto de 2003

Me levanté a orar bien temprano, pidiéndole a Dios que me dé fuerzas y proteja a todos los de la familia, especialmente a Sofía.

Llegando a la oficina me llamó mi papá, para ver cuando le vamos a pagar.  Eso me deprimió más, pues no tenemos como pagarle y eso me duele mucho, pues sé como eso lo afecta a él; ya que le demuestra nuestra triste realidad y eso lo hace preocuparse por la situación económica de “sus hijos”.  Le pedí a Jesús su misericordia y que toda esta situación se arregle, para bien de toda la familia y que se evidencie su milagro y su poder.

El día continuó bastante mal, pues otro proveedor del sistema de consignación retiró su mercadería. El centro comercial no le recibió la llamada a nuestro abogado o sea que no sabemos que están pensando; los Bancos no dicen nada y con Nejapa Power no camina nada y más bien todo se ha retrasado. 

Los de Nejapa Power nos ignoran, ya no tenemos dinero ni para pagar los teléfonos y mis ahorros personales ya están bajando considerablemente; sin embargo, tengo confianza en Dios que Él nos va a sacar adelante, no sé como. 

Por la tarde me fui a ver a mis papás y la reunión fue negativa al principio, pues el tema del dinero salió a relucir.  Perdí el control y después, pidiéndole al Espíritu Santo que me iluminara me fui calmando y pude hacerles ver mi punto de vista.  La reunión terminó positiva y sobre todo sirvió para que mi mamá recapacite sobre lo que representa su enfermedad, para la sanación y unión de la familia y nuestro acercamiento a Dios. 

No pudimos ir a la reunión de “Encuentros”, pues ya salí tarde de donde mis papás y me sentí muy triste.

Miércoles 20 de Agosto de 2003

Hoy nos notificó el abogado,

que la Orden de Pago de Nejapa Power a los Bancos se puede anular.

Comencé el día pidiéndole a Dios que me dé fuerza para llevar mi cruz, que me dé fuerzas para aceptar su voluntad con gozo.

Llegué a la oficina y hablé con un Director.  Le aclaré que ya estábamos en el proceso de cerrar, pues los Bancos no nos habían autorizado el crédito y que si esa era la voluntad de Dios, que había que aceptarla. 

Después me llegó una carta de KPMG, diciendo que el interventor del centro comercial había llegado a notificarles que estábamos intervenidos y que por tanto, ellos querían renunciar al contrato de control con los proveedores; pero antes se querían reunir conmigo. Acordamos una reunión para mañana. 

Juan Ernesto estaba bastante preocupado, pero el Espíritu Santo también lo está guiando a él, para aceptar la voluntad del Señor y me contó como toda esta experiencia lo había acercado más a Dios y que a pesar de todo, él no hubiera preferido que no hubiéramos tenido todos estos problemas, pues todo esto ha servido para acercarlo más a Dios.  Me sorprendió que me estaba diciendo lo mismo que yo pienso y sentí que era otro mensaje más, que Dios está con nosotros.

Por la tarde nos reunimos con nuestro abogado y nos comunicó que estábamos en posición de solicitar que se declare nula la Orden de Pago de Crystal Power a los Bancos y esto nos coloca en una posición de fuerza para negociar con ellos; pues además nos tendrían que devolver lo que ya les hemos pagado en intereses (que son mas diez millones de dólares).   Sentí que esto era una bendición de Dios y durante la reunión le daba gracias al Espíritu Santo por lo que nos estaban contando.

Al regresar a la casa “doblé rodillas” en agradecimiento al Señor y leyendo mi oración, el Espíritu Santo me iluminó para comprender lo importante que es la intercesión de San José, pues le he pedido mucho a él.

Jueves 21 de Agosto de 2003

Amanecimos donde mis papás, pues mi mamá se fue ayer a su chequeo a Houston.

Tuvimos Junta Directiva y fue bien positiva.  Acordamos tener una reunión con el personal y los jefes, para notificarles que es lo que está pasando y como estamos, a raíz de la retirada de Roberto, nuestro gerente general.

Fui a misa y le pedía a Dios que me diera fuerzas para aceptar su voluntad.

Por la noche fuimos a la reunión de “Encuentros” y nos dio la charla un Padre que vive en Italia.  Habló de la obligación de los padres de familia para la educación religiosa de sus hijos y como los judíos tenían esto bien cimentado y se fomentaba la oración en familia. 

Le pedí al Espíritu Santo que me diera ese don de sabiduría, para comprender Las Escrituras como él las manejaba.

Sentía un gran peso encima y le pedía a Dios que me diera fuerzas.

Viernes 22 de Agosto de 2003

Nos reunimos con Alex temprano, para discutir la proposición del abogado, pero antes me había reunido con todos los jefes de departamento, para actualizarnos en que momento estábamos.  La reunión con los jefes fue sumamente positiva y todos sentí que se solidarizaron con nosotros.  Sentí que no era yo el que hablaba, sino el Espíritu Santo y sentí su “llenura” mientras hablaba y que era Él quien me ponía sus palabras en mi boca.  Después me felicitó Juan Ernesto, pues todos los jefes le habían comentado lo positivo de la reunión, pero me lo comentó de forma que comprendí que era evidente que fue al Espíritu Santo al que escucharon y no a mí.

Por la tarde regresó Alex para contarme de la reunión con el abogado y venía muy contento, pues además, él le había comentado de la posibilidad de que una Fundación que él maneja, comprara la deuda de los Bancos y nos diera el financiamiento necesario, para que Schwartz no tuviera que cerrar.

Al escucharlo, le recordé de las palabras del Padre Fernando que una vez me dijo que: “la solución le va a venir de donde menos la esperan”.  Sentí que era un mensaje de Dios para darnos fuerzas en el camino, aunque todavía siento que éste es bastante largo todavía.

Sábado 23 y domingo 24 de Agosto de 2003

Hoy cumplimos un año de haber ido

al Retiro de Encuentros y de “haber conocido a Dios”.

Me fui a jugar tennis con Roberto Adriano y él venía feliz porque me ganó 6 a 2.  Yo le daba gracias a Dios porque puedo tener estos momentos con él, pues es una bendición poderlos compartir.

Por la tarde fuimos al servicio de Capilla, para pedir por las parejas del Encuentro 38.  Sentí la presencia del Espíritu Santo que nos había llevado ahí.  Al principio nos fuimos a la Capilla de Cristo Redentor, pues ahí nos había dicho Arturo de llegar, pero la perseverancia y el Espíritu Santo nos hizo no darnos por vencidos y buscar adonde era.  El servicio estuvo lleno de la presencia del Espíritu Santo y cuando me tocó leer La Palabra, me tocó leer Hechos 8, 4-8; que habla del anuncio de Felipe a los samaritanos y como “espíritus malos salían de los endemoniados” y que “hubo, pues, gran alegría en aquella ciudad”.  Sentí que era un mensaje para Sylvia Regina y para mí, que las cosas iban a empezar a mejorarse (pues es presisamente por lo que hemos estado pasando).  Le dimos gracias a Dios. 

El domingo lo pasamos todo el día en la casa de mis papás y a las cinco los llevamos a misa.  En el momento de darnos la paz, yo se la iba a dar normal a mí papá, pero él me dijo que me quería dar un beso y me lo dió.  ¡Es primera vez, que yo recuerde, que mi papá me daba un beso!  (nuestra relación siempre ha sido excelente, pero nunca “amorosa”, sino más bien de suponer que “todos los papás aman a sus hijos”; pero ahora él me lo había demostrado y eso me agradó sobremanera.)

Le di gracias a Dios por todas sus bendiciones y por la obra que está haciendo para que toda la familia se una y “sane” y que de ahora en adelante todas las futuras generaciones queden libres de toda “maldición”. 

Gracias Señor, por este fin de semana!