Lunes 16 de Septiembre de 2002
Hoy tuvimos un día difícil, pues ya el efectivo nos está escaseando, pero pensándolo bien es al revés, de alguna forma estamos sobreviviendo y apenas alcanza, pero alcanza. Nos reunimos con Lorena y a pesar de la crisis, la reunión fue “extremadamente” positiva y solidaria. Le daba gracias a Dios.
Algunos proveedores siguen con amenazas, pero ya no son agresivos.
Por la tarde fui a misa y al Santísimo y por la noche fuimos al grupo de “Encuentros” a la casa de los Ancalmo y fue bien reconfortante y como un oasis, dentro de toda esta tormenta en el desierto.
Sigo con una enorme Fe que todo va a salir bien y eso es lo que sentí que Dios me confirmaba en la reunión. Le daba gracias a Dios por habernos llevado a ese movimiento y por permitirnos crecer juntos hacia Él.
Escogimos el nombre del grupo y el que seleccionaron los secretarios del movimiento fue: “A Jesús por María”, que fue el que yo había sugerido y estoy seguro que por una iluminación del Espíritu Santo. Sylvia Regína estaba bien contenta.
Martes 17 de Septiembre de 2002
Hoy fue un día de esos áridos y no ocurrió nada, excepto que el Banco no nos liberó la cuenta. Ya son 47 días de estar congelada y es ya un milagro que hemos aguantado tanto; sin embargo, todos estamos cansados. Por el otro lado, también el presidente de otro Banco no nos dice nada y eso no camina. También es de admirar que Alex no se ha desesperado, estoy seguro que con la ayuda del Señor.
Me puse a leer el Evangelio y me encontré un librito que había comprado, sobre el Rosario y sentí que era una iluminación de Dios para que le empezáramos a rezar con Sylvia Regina en las noches, en vez de las Novenas. Así se lo dije y estuvo de acuerdo, además el librito termina con la leyenda: “Esta ha de ser nuestra divisa: “A JESUS POR MARIA”, lo misma que el nombre del grupo de oración!!!
Fuimos a misa y después al Santísimo.
Me di cuenta que hoy es el día de San Roberto Belarmino, eso me motivó a seguir leyendo la biografía de San Agustín, que está fascinante, casi no quería parar de leerla. Fuimos a la casa de Lourdes, una muy buena amiga de Sylvia Regina, por su cumpleaños y después ella me comentó que me veía más contento. Así me sentía, con Jesús toda la noche a la par mía y a pesar de todos los problemas me siento contento y aliviado, además privilegiado por Dios.
Miércoles 18 de Septiembre de 2002
Este fue un día especial y lindo.
Pasé la mañana, sólo esperando si llamaba Comex y Vidal, pero no pasó nada, sin embargo me sentía tranquilo. A las 2:30 vino Edith, una profeta del Señor que ha visto a Jesús y todo fue sorprendente. Yo estaba un poco incrédulo, pues no sabía qué íbamos a hacer. Se me ocurrió bajar con la imagen y la Novena de San Miguel Arcángel, pues fue ella quien nos recomendó resarle. La imagen fue un regalo de Sylvia Regina. Edith se sentía muy contenta de estar con nosotros y nos comentó de leer el libro “El Regreso a Casa, El Regreso a Roma” de Scott Hahn, luego me comentó que Dios le había dicho que nuestro testimonio iba a servir para ayudar a montones de parejas. Yo me sonreí pues era lo mismo que me había dicho el Padre Fernando y le comentamos lo de “Encuentros Conyugales” e inmediatamente me leyó Proverbios 16, 4 “El Señor lo ha creado todo con un propósito: aún al hombre malvado para el día de castigo”, que era lo que Dios le había encomendado leerme como mensaje.
Cuando le comentamos lo de Encuentros nos dijo, “acabo de recibir un mensaje del Señor para leerles, Jeremías 1: 4-12 y me tengo que poner de pié para leérselos”, nos dijo:
“4 Me llegó una palabra de Yavé, y me dijo: 5 antes de formarte en el seno de tu madre ya te conocía; antes de que tu nacieras, yo te consagré y te destiné a ser profeta de las naciones”. 6 Yo contesté, “¡hay Señor!¡Yo soy muy joven y no sé hablar!” 7 Pero El Señor me dijo: “No digas que eres muy joven, tú iras donde Yo te mande y dirás lo que Yo te ordene 8 No tengas miedo de nadie, pues Yo estaré contigo para protegerte. Yo, el Señor, doy mi Palabra.”. 9 Entonces el Señor extendió su Mano, me tocó los labios y me dijo: 10 “Yo pongo mis Palabras en tus labios. Hoy te doy plena autoridad sobre reinos y naciones, para arrancar y derribar, para destruir y demoler y también para construir y plantar.”11 El Señor se dirigió a mí y me dijo: “Jeremías, ¿qué es lo que ves?”. “Veo una rama de almendro” –contesté. 12 “Tienes razón –me dijo el Señor- En efecto, voy a estar atento a que mis Palabras se cumplan.”
Me sentí muy especial y privilegiado por Dios (en realidad todos lo somos). Tal y como había expresado ayer, sentí el calor del Espíritu Santo venir hacia mí.
Después oramos a Dios. Por medio de ella, nos comunicó que todo se iba a arreglar con Nejapa Power y que Él quería que nos dedicáramos a salvar matrimonios y que Él iba a hablar a través mío, para darme toda la sabiduría y autoridad que necesitaba; para que nuestra labor se cumpla y cumplamos su voluntad.
Que no debía ser tímido, sino hablar con fuerza y que Él me iba a poner e iluminar con las palabras adecuadas. Me mencionó lo de la división de nuestra familia y me dijo que todo se iba a arreglar y que la unión iba a volver, pero que todo debía ser promovido por mí. Nos mencionó el papel de Sylvia Regina y la comparó con la acción intercesora y dulzura de nuestra Madre, la Virgen Santísima… ambos lloramos. Yo lloré como un niño, casi a explotar y me sentía muy privilegiado, dispuesto y decidido, sin ninguna condición, para aceptar y desarrollar el rol y destino que el Señor nos estaba confiando.
Le dimos gracias a Dios y Edith nos dijo que en el momento de la oración, estaba habiendo una “Fiesta en el Cielo”.
Me dijo que mi primera misión era hablar y unir a nuestra familia. En su oración surgieron varias profecías: el matrimonio de Ariana, nuestra hija mayor, la visión del primer nieto y Sylvia Regina chiniándolo; la reunión de nuestra familia y que íbamos a ser consejeros de parejas jóvenes… “muchas parejas de jóvenes”, nos dijo.
Jueves 19 de Septiembre de 2002
Hoy 19, casi le pedía a Dios que no hubiera mucho que contar (pues lo de ayer fue tan maravilloso y largo que me tomé parte del espacio de este dia, en la Agenda) para que no tuviera mucho que escribir y me cupiera todo en la Agenda.
Así fue, no pasó mayor cosa, excepto que le conté a Alex lo de ayer y siento que lo calmé bastante y me dijo que se sentía contento que me sintiera así.
Por la noche fuimos a la reunión de Encuentros y hoy terminamos la Novena a San Miguel Arcángel.
Viernes 20 de Septiembre de 2002
Hoy de nuevo, no pasó mayor cosa en la oficina. Pasé todo el día leyendo el libro “El regreso a Casa, El regreso a Roma”, el cual he encontrado fascinante y “el mejor libro” que he leído en mi vida. Por suspuesto incluyendo todos los de política, finanzas, técnicos, autobiografias, novelas, ficción, etc, etc. Es decir, de todos los temas que he leído, no solo de religión.
Me vino como a reforzar toda mi Fe y todo lo que Edith nos vino a anunciar, sobre nuestro apostolado de aconsejar y salvar matrimonios.
Leyendo el libro, me sentía cada vez más cerca de Dios y le daba gracias por todas sus bendiciones. El libro me impactó por todas sus enseñanzas sobre nuestra religión católica, pero igualmente para comprender que la familia es la esencia misma el amor de Dios y el papel tan importante que Él nos ha dado.
Me impactó lo ejemplar de este matrimonio del autor del libro, en comprender que “somos uno” con nuestro cónyuge y que el centro de todo matrimonio debe ser Jesús y la Virgen María, como su intercesora.
Vuelve a mencionar lo que nos dijo el Padre Urioste en nuestra primera charla de Encuentros, hace unas semanas: “El matrimonio no es difícil, es humanamente imposible, el único que lo hace posible es Dios y por eso es un Sacramento”. Después de leerlo, no me aguntaba las ganas por recomendárselo a todos; sobre todo a mi mamá, para que le ayude en su búsqueda del amor de Dios.
Sabado 21 y domingo 22 de septiembre de 2002
Hoy sábado terminé el libro “El regreso a Casa, El Regreso a Roma” y casi terminé el de San Agustín, que había comprado en nuestra primera “Asamblea de Encuentros”. Increíble como los dos se complementan y los he sentido como una revelación de Dios; pues los dos los he leído a la par.
Mi próxima tarea es leer las obras de San Agustín, que me ha surgido una especial atracción hacia ellos y siento que Dios me está llamando a leerlos.
De alguna manera, el problema de las empresas ha caído en segundo plano. Tanto ayer como hoy, preferí leer los libros, que preocuparme de los negocios. Señor, ¿Es esto lo que tu quieres? ¿Que ya no sea relevante para mí lo que pasa con las empresas, sino mas bien que te conozca más?
Tengo Fe que las empresas ya están ya en sus manos, me he abandonado en su voluntad, sin embargo, tengo una enorme Fe que éstas van a salir adelante, porque Él nos lo dijo por medio de Edith, que Él nos iba a proporcionar todo lo que necesitemos para ejercer nuestro apostolado y además, porque si salen bien, nuestro testimonio cobra mayor fuerza ante las “creencias humanas”; sin embargo, que se haga su voluntad!
"Para el auténtico sabio, lo próspero y lo adverso, la riqueza y la pobreza, la salud y la enfermedad, los honores y los desprecios, la vida y la muerte son cosas que, de por sí, no son ni deseables ni aborreciles. Si contribuyen a la gloria de Dios y tú felicidad eterna, son cosas buenas o deseables; de lo contrario son malas y aborrecibles."
ResponderEliminarSan Roberto Belarmino